El sector hotelero de la Costa pide que se regulen los pisos turísticos como en Granada

La Junta aprobó a principios de año un nuevo decreto que regula los pisos turísticos y que permite a los ayuntamientos limitar la proliferación de este tipo de viviendas en las localidades andaluzas. El presidente de los hoteleros de la Costa Tropical, Jesús Megías, señala que es necesario que los municipios den pasos para regular esta actividad que daña «a todos los sectores económicos de la comarca y principalmente a los propios vecinos».

«Los ayuntamientos de la Costa Tropical deberían tomar nota de Granada, nuestra vecina ya ha tomado medidas para reducir el impacto y congelar nuevas autorizaciones», arranca el empresario. A juicio de Megías, el auge de los pisos hará que los destinos se masifiquen y acabará con el empleo en el sector turístico del litoral.

«Los hoteles y la hostelería somos generadores de empleo y este tipo de negocios daña a la rentabilidad de muchas familias, además de los empresarios, porque se reducen los puestos de trabajo», comenta el máximo representante del sector en el litoral. «Los ciudadanos presentan muchas dificultades para acceder a un alquiler todo el año, se disparan los precios de forma desorbitada por la presión de los alojamientos turísticos y es complejo acceder a una vivienda.La administración debe ser sensible con la situación y el daño que se provoca a sus vecinos y al sector», sentencia.

La federación provincial de turismo de Granada estima que de los 16.000 pisos turísticos que tiene la provincia, 3.000 se encuentran en el litoral y 6.000 en la capital granadina. En la Costa hace una década había un millar menos. Es más, en la costa los proyectos que se manejan desde hace dos décadas para ampliar la oferta en más de mil plazas con proyectos millonarios se frustran frente al auge de los apartamentos turísticos.

En la capital granadina, tal y como ha adelantado este periódico, el Ayuntamiento ya ha puesto en marcha su propuesta para limitar las viviendas de uso turístico. En un primer paso, el gobierno municipal quiere contener el boom poniendo el freno a los pisos diseminados. La primera norma que aprobará el Consistorio es que estas viviendas deben tener un acceso independiente, por lo que se corta la aparición de nuevos inmuebles dedicados al turismo en portales de vecinos. Es decir, los pisos turísticos tendrán que estar situados en bloques enteros con este uso o casas de varias plantas que se dediquen por entero al alquiler turístico.

El gobierno de la capital pondrá en marcha esta primera contención de las viviendas turísticas con una figura que llamada 'criterio de interpretación' del PGOU, mientras que modifica el plan para que las normas urbanísticas regulen este tipo de pisos. El consistorio anunció el 12 de junio que suspenderá temporalmente la concesión de nuevas licencias de viviendas turísticas a partir de este mes de julio. Este nuevo criterio se aprobará en pleno y después se congelarán las nuevas licencias, una suspensión que se mantendrá mientras la modificación del PGOU no se apruebe de manera definitiva.

Por su parte, desde el Ayuntamiento de Motril apuntan que ahora mismo no se va a actuar a este respecto, aunque tienen constancia de que algunas comunidades de vecinos ya están «actuando dentro de sus posibilidades para combatir los pisos turísticos». En la misma línea, el Ayuntamiento de Almuñécar señala que se encuentra inmerso en la renovación de su PGOU, por lo que descarta tomar medidas en este sentido para evitar retrasos.