La Guardia Civil redobla el control de las motos de agua en la Costa de Granada

El pasado fin de semana, en la playa de San Cristóbal (Almuñécar) la Guardia Civil tuvo que intervenir desde el aire con un helicóptero y sancionó a tres individuos por el uso inapropiado de las motos de agua. Los tripulantes también se encontraban navegando cerca de otros bañistas en zonas no habilitadas.

Para hacer frente a esta situación, la Guardia Civil junto con la Policía local van a lanzar una campaña de prevención dirigida a todos los usuarios de motos de agua, con el objetivo de proporcionar información clara sobre las prácticas correctas e incorrectas al utilizar estas embarcaciones. Esta iniciativa busca reducir los accidentes y promover un uso responsable y seguro de las motos durante la temporada estival

Además, se llevarán a cabo controles a las distintas empresas que ofrecen servicios de alquiler de motos de agua para asegurar el cumplimiento de las normativas vigentes. También se implementarán medidas para controlar el acceso de estas motos a las playas, garantizando así la seguridad de los bañistas de la zona.

El Ayuntamiento de Almuñécar-La Herradura seguirá vigilando sus playas con drones que reporten infracciones a la Guardia Civil en caso de incidentes. «Esta actuación se ha adelantado respecto al año pasado y se prolongará hasta septiembre», explica Lucía González, concejal de Playas de Almuñécar. Además, como novedad se instalará cartelería informativa en las playas para los usuarios de estas embarcaciones. También se realizarán diversas actuaciones de control de embarcaciones en los diferentes canales antes de llegar al agua.

Desde esta semana se está trabajando en el balizamiento de las playas para que no haya percances de este tipo.

Las autoridades municipales tienen competencias limitadas para «frenar» el uso inapropiado de estos vehículos. Los ayuntamientos han mostrado su oposición a las motos que generan inconvenientes o que no están afiliadas a las empresas que operan legalmente en las localidades y poseen sus permisos en regla.

Las motos de agua, con su velocidad y agilidad, ofrecen emociones únicas en el agua. Sin embargo, cuando se utilizan sin precaución, pueden provocar molestias a otros usuarios y poner en riesgo la seguridad marítima.

Las empresas responsables de alquilar motos acuáticas juegan un papel crucial en mitigar estos problemas. Estas compañías se esfuerzan en educar a los usuarios para que cumplan las normas y no haya percances.

Fermín Giménez, propietario de Oro Boats, una destacada empresa de embarcaciones acuáticas en Almuñécar, explica que las motos acuáticas no son una moda, sino que siempre han contado con un público constante. El perfil de quienes demandan estos servicios generalmente incluye grupos de amigos y parejas. Esta empresa ofrece tanto rutas guiadas con monitores como alquiler libre de motos acuáticas, siempre que los usuarios posean la correspondiente licencia de navegación.