Miércoles de plenitud cofrade en Almuñécar

50 minutos después de su salida, llegaba el turno de la Cofradía del Descendimiento y Santa María del Alba: 140 hombres y mujeres portaban un paso que elevaba ambas imágenes, por segundo año, en un mismo trono. Con una nueva cruz guía e incensario, se echaron a la calle con una talla también nueva para Santa María del Alba en una noche de novedades, también en cuanto a música, ya que el acompañamiento lo hacía la Banda de Jesús Rescatado de Los Infantes de Ciudad Real. Las puertas de la Iglesia de la Encarnación se abrieron por tercera vez a las once: era el momento de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Expiración, una de las agrupaciones más multitudinarias. Al paso del Cristo del Silencio, acompañado por más de 200 personas, el alumbrado se apagó, al acompañamiento de dos tambores roncos y una trompeta. Recogimiento, sobriedad y quietud a lo largo de todo el recorrido que llegó a su fin pasadas las dos y media de la madrugada.