El Consorcio Metropolitano estudia desde hace un año la fusión de líneas de bus

El director gerente del Consorcio de Transporte Metropolitano de Granada, Jorge Saavedra (PP), ha criticado la «falta de conocimiento y rigor» del alcalde de la capital, Paco Cuenca, al proponer unas líneas al margen del plan metropolitano, sin tener en cuenta los pertinentes estudios de población y movilidad ni las dificultades que supone integrar sistemas de explotación distintos.

Cuenca acordó con sus homólogos en Maracena, Santa Fe y La Zubia crear dos nuevas líneas de autobús, con una estimación de dos millones de viajes al año y que beneficiaría a 290.000 habitantes del Área Metropolitana. La línea 1 sería una extensión de la actual N3 de la capital, fusionada con la 120 del Consorcio para llegar hasta Maracena. La segunda ruta uniría tres líneas actuales del Consorcio con la N1 de Granada y llegaría hasta Santa Fe y La Zubia.

Los representantes municipales pidieron que las propuestas fueran ratificadas «con la mayor celeridad posible» por el Consorcio de Transporte. Esta entidad, sin embargo, apuesta por basar este tipo de decisiones en los resultados del plan que se presentará en los próximos meses, y por discutirlas en los foros creados para ello.

En mayo de 2021, la Junta convocó unas jornadas participativas de diagnóstico a las que invitó a ayuntamientos metropolitanos, empresas de transporte o asociaciones de movilidad, entre otros colectivos. Se habló de la necesidad de poner trabas al vehículo privado, de incentivar el uso de la bicicleta, de crear intercambiadores de transporte y plataformas reservadas y también de la posibilidad –así está recogido en el documento de conclusiones– de establecer planes coordinados de transporte.

Más tarde, en diciembre, fue el Ayuntamiento quien convocó un foro de trabajo sobre rutas coordinadas. Asistió un representante del Consorcio. El Ayuntamiento propuso dos líneas:una que atravesara Granada, Armilla, Churriana y Las Gabias y otra entre Granada y la Era Baja de Maracena. La primera de ellas coincide con la propuesta de ampliación del metro por el Sur. En cuanto a la segunda, es muy similar a la planteada esta semana. El documento presentado por el Ayuntamiento sugería que el coste de la línea se calculara mediante el sistema de la capital: la empresa cobra lo estipulado por un estudio de coste del servicio sumado al beneficio industrial justo.

Saavedra lamenta la «falta de conocimiento y rigor» del alcalde. La coordinación de dos modelos administrativos distintos para la explotación de los servicios –el de la capital y el metropolitano– es viable técnica y jurídicamente, pero la elección no es sencilla.

Como no lo es, señala el director gerente del Consorcio, la decisión sobre los itinerarios de las líneas. Si la creación de nuevos itinerarios sin trasbordo entre la capital y los municipios no va acompañada de otros cambios, las líneas pueden solaparse o dejar con menor cobertura a algunas localidades.

Por todo ello, Saavedra defiende la utilidad del plan, que a estas alturas de su redacción ya contempla rutas coordinadas y nuevos itinerarios. Introducirá cambios importantes, pasando de un modelo radial –basado en la movilidad entre los municipios y la capital como centro del mapa– para que haya mejor conexión entre las localidades del Cinturón. Además, tendrá en cuenta la ampliación del metro –la extensión por el sur es la que se acometerá primero– y parámetros como la población y flujos de movilidad.

«Es tiempo de trabajar juntos y no de ideas unilaterales», insiste Saavedra. Aunque subraya la importancia del plan para el futuro de la movilidad metropolitana, recuerda que el Consorcio sigue trabajando en mejoras inmediatas del sistema. Atarfe ha conseguido tener enlaces con la capital cada 20 minutos, Cájar y Huétor Vega han quedado conectadas en bus con el metro y un bus lanzadera recién estrenado une los barrios de Ogíjares con las paradas de metro dePTS y Nevada.