El Consejo de Ministros sigue sin aprobar la financiación comprometida para Adia Lab

Es quizá el más llamativo. El proyecto estaba llamado a ser la punta de lanza tecnológica de la ciudad, una iniciativa de rango internacional y con capacidad para hacer olvidar el descalabro sufrido por Granada en su intento por lograr la sede de la Agencia Estatal de Supervisión de la Inteligencia Artificial, que recayó en La Coruña en diciembre del año pasado.

La propuesta partió del interés de Emiratos Árabes Unidos por estrechar lazos con España en el ámbito político y económico. Como contó IDEAL, a principios de febrero, el presidente Pedro Sánchez mantuvo un encuentro con el príncipe heredero de Abu Dhabi, Mohammed Bin Zayed, que se saldó con la firma de una declaración para abordar una «estrategia conjunta» entre ambos países. La consecuencia fue el impulso de una iniciativa para poner en marcha un centro de investigación sobre tecnologías disruptoras como la inteligencia artificial, la automatización o la supercomputación. 

Sobre esta base, la secretaria de Estado, Carme Artigas, sugirió la posibilidad de que el centro se estableciera en la capital nazarí en un momento en el que Granada debatía el recurso contra la decisión del Ejecutivo de trasladar la sede de la Aesia a Galicia. Las faltas que el Consejo de Ministro vio para no traer la institución a la provincia no pesaron, sin embargo, para implantar el instituto emiratí aquí. Así, se llegó al acuerdo de que la sede fuera el antiguo hospital de La Salud, que meses atrás estaba llamado a ser el espacio para montar la Aesia.

En mayo, semanas antes de las elecciones municipales, se quiso hacer visible el compromiso de las administraciones con el proyecto. Fue en el Cuarto Real de Santo Domingo, con la presencia de representantes emiratíes así como la secretaria de Estado y el entonces alcalde de la ciudad, Paco Cuenca. En aquella cita se dejaron entrever algunos detalles. Por ejemplo, se planteó que el centro empezaría a funcionar en 2024 con una escuela de verano que atraería a investigadores de toda Europa. También se señaló que contaría con una inversión de cinco millones de euros que servirían para potenciar iniciativas en las que estarían involucradas empresas tecnológicas del ecosistema granadino.

El Consejo de Ministros debía aprobar la llegada de los fondos de manera inminente. Sin embargo, no ha sido así al final. Ninguna de las sesiones celebradas por el Ejecutivo antes de las elecciones generales de julio ni las organizadas con posterioridad han abordado una financiación que resulta clave para que el estudio pueda funcionar.

Este periódico contactó esta semana con la Subdelegación del Gobierno para conocer la situación del expediente y si, efectivamente, se esperaba que la partida fuese aprobada a corto plazo, pero la institución no respondió. Sí lo hizo el Ayuntamiento de Granada, que reconoció que el avance del instituto se mantiene en la misma situación y «no hay novedades». Eso incluye tanto la cesión del espacio que ocupará, que será la misma ofrecida en tiempos de Paco Cuenca, como el resto de aspectos vinculados al proyecto.

La recuperación de la antigua Tabacalera fue uno de los proyectos estrella anunciados en vísperas de las elecciones municipales. El camino, si bien, se había iniciado mucho antes, en 2019, cuando el entonces regidor socialista Paco Cuenca abordó la necesidad de poner en valor unas infraestructuras de enorme interés que la ciudad tenía sin uso desde el cierre de Cetarsa.

La llegada del bipartito paralizó la operación, que tomó nuevos bríos tras el regreso de los socialistas al frente del gobierno municipal. Fue entonces cuando se abordó la posibilidad de adecuar la zona para dar respuesta a la demanda de sitio que empezaba a tener el sector tecnológico. Junto al Círculo Tecnológico de la Confederación Granadina de Empresarios, se entablaron conversaciones con el Ejecutivo que fraguaron a comienzos de este año. Entonces, como contó IDEAL, se anunció la próxima rehabilitación de las naves ubicadas en el entorno del Cortijo del Conde, unas instalaciones que podrían ser sede para una veintena de empresas y cuya reapertura permitiría crear 1.000 puestos de trabajo.

En marzo se firmó el convenio con el Ejecutivo para la inversión de 8 millones en un acto en el que participó la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. En aquella cita se señaló que la llegada de las empresas a las instalaciones sería en 2024. Antes, debían ejecutarse las obras.

Según la Subdelegación del Gobierno, el proyecto básico de rehabilitación y ampliación del edificio P-8 está entregado desde hace seis meses y actualmente se está tramitando. En paralelo se está trabajando en el proyecto constructivo de ejecución. Este proyecto servirá de base para licitar las obras, que podrán ejecutarse una vez obtenida la licencia.

Desde el Círculo Tecnológico, apuntan que las conversaciones se están manteniendo en los últimos meses y que todo apunta a que el calendario inicialmente previsto se mantenga.

De todos los proyectos pendientes del Gobierno en Granada, el de la restauración del río Monachil es quizá el más avanzado. La iniciativa se encuentra a la espera del inicio de los trabajos después de que el pasado 4 de mayo concluyera el plazo de alegaciones sobre el documento de restauración que contempla la construcción de un sendero peatonal para conectar Monachil y Huétor Vega con la capital. El proyecto viene abanderado por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y conlleva la recuperación hidrológica y paisajística del cauce. Según apunta la Subdelegación, en junio se aprobó el proyecto con un presupuesto de 7,2 millones y en julio se encargó a Tragsa después de recibir el visto bueno de los fondos europeos. En estos momentos, como señalan desde la Subdelegación, se encuentra en fase de expropiaciones de algunos de los terrenos necesarios.