Condenado por herir con una escopeta de perdigones a dos hombres en Huétor Tájar
El acusado, que se enfrentaba inicialmente a una petición de 18 años de prisión, se confirmó en el juicio con tres y medio
Tres años y medio de prisión. Ese ha sido el castigo finalmente aceptado por el joven acusado de disparar con una escopeta de perdigones, hace ... cuatro años, a dos hombres en Huétor Tájar. El juicio fue el pasado 28 de abril y, según consta en la sentencia dictada por la Audiencia de Granada, este aceptó ser autor de tres delitos: uno de homicidio en grado de tentativa, otro de lesiones por imprudencia y otro más por la tenencia ilícita del arma.
El fallo, que firma la Sección Segunda del tribunal provincial y que no había trascendido hasta ahora, revela que el día de la vista hubo un acuerdo previo mediante el que la fiscalía rebajó considerablemente su petición, puesto que inicialmente reclamaba 18 años de cárcel.
La sentencia, dictada con la conformidad del acusado, declara probado que el encausado, sobre las 11.50 horas del 27 de agosto de 2018, se plantó en la calle Ermita de Huétor Tájar «con una escopeta con munición metálica de perdigones en buen estado de conservación y funcionamiento que podían ser disparados por cualquier arma de su calibre y características».
Provisto de la citada escopeta, para la que no tenía permiso, se dirigió hacia un hombre «con la intención de acabar con la vida de este». Así, «le apuntó a la cara y disparó una descarga de perdigones». Los proyectiles alcanzaron a otro vecino que, no obstante, «pudo protegerse con los brazos el rostro», impidiendo que el disparo le alcanzara en la cara.
Lesiones
A consecuencia del disparo, una de las víctimas sufrió heridas por impacto de perdigones en distintas partes del cuerpo, hallándose ocho de los proyectiles en el el tórax. En su caso, sanó tras una primera asistencia facultativa sin necesidad de tratamiento médico o quirúrgico posterior. Curó sin secuelas y renunció a la indemnización que le pudiera corresponder.
La otra víctima sufrió heridas que le afectaron al pulmón y a la pared muscular abdominal. Su curación precisó, además de una primera asistencia facultativa, «tratamiento médico, farmacológico, sintomático, analgésico y sedante, ingreso hospitalario para observación sin tratamiento quirúrgico, reposo relativo y curas secas en centro de salud de las heridas». Tardó en curar diez días.
El fallo, que fue declarado firme en el acto, impone exactamente al procesado dos años y medio de prisión por el delito de homicidio frustrado, otros seis meses de encierro por las lesioens imprudentes y seis más por la tenencia ilícita de la escopeta.
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