Clausuran el aparcamiento 'pirata' en un solar de la calle Elvira
La rotura del muro y la puerta de entrada habían permitido desde febrero el acceso a la parcela, responsabilidad de Avra
Desde el próximo lunes será imposible aparcar en el aparcamiento 'pirata' de la calle Elvira. El solar, responsabilidad de la Agencia de Vivienda y Rehabilitación ... de Andalucía (Avra) quedará clausurado tras varias semanas abierto de par en par, después de la caída de la puerta y el muro que impedían el acceso a la parcela abandonada en el bajo Albaicín.
Los vecinos del barrio alertaron a mediados de febrero de la caída del portón del número 56, que empezaba a ser «un vertedero». En efecto, como pudo comprobar ayer IDEAL, en el descampado llega a entrar una quincena de vehículos, que conviven con la basura desperdigada por las esquinas del mismo. «Ese es el lamentable ejemplo de las administraciones públicas en cumplir sus propias normas, incluida la obligación de edificar los solares, y éste lleva decenas de años de incumplimiento», señalaron los vecinos de la asociación Bajo Albayzín en una publicación en su página web.
La Junta de Andalucía, finalmente, clausurará el lunes el aparcamiento ilegal. Ayer empezó a avisar del cierre a los usuarios del aparcamiento, con carteles que advierten de que los coches que el día 3 de mayo permanezcan en el interior del recinto serán retirados por la grúa.
En el terreno convertido en párking improvisado estaba prevista una actuación dentro del plan de la Junta para construir viviendas protegidas en alquiler, locales comerciales y aparcamientos que ayudarían a la regeneración del Albaicín en la ladera del Zenete. De aquel proyecto solo se llegó a concretar un parking.
En 2014 quedó desplazada esa opción y Avra planteó convertir el llano en un aparcamiento para residentes. Tampoco aquel plan prosperó.
El descampado es uno de los puntos negros del bajo Albaicín. El muro superior está en visible mal estado, mientras que el callejón lateral es una de las zonas que algunos jóvenes aprovechan para el menudeo de droga. Otros hacen sus necesidades allí. La entrada está habitualmente cubierta de pintadas y carteles promocionales, cuando no está abierta porque los usuarios la fuerzan para meter los vehículos.
Es tan solo una de las zonas inseguras por las que los vecinos del barrio llevan meses protestando, incluso en manifestaciones, y de las que vigilan los grupos que empezaron a 'patrullar' las calles en febrero, acompañando a los mayores o mujeres que regresaban a sus hogares por las tardes. Este lunes quedará cerrada de nuevo.
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