Multitudinaria despedida a Spiriman en Granada

El sanitario, popularmente conocido como Spiriman, abanderó la marea blanca por una sanidad pública y de calidad en Andalucía. Admirado por unos y detestado por otros, logró cambios en las condiciones laborales de los sanitarios, así como en los recursos hospitalarios para pacientes oncológicos.

El funeral se ha celebrado a las once en punto de la mañana, con el cuerpo presente, en el tanatorio de Emucesa. Media hora antes de dar comienzo el acto, más de 300 personas esperaban ya a las puertas del lugar entre lágrimas y largos abrazos.

A los pocos minutos de la misa, dos coches fúnebres han llegado al exterior del Espacio de Culto, repletos de flores y recuerdos de sus compañeros del Hospital Clínico San Cecilio. «Que siempre te recordarán como médico, el más valiente», «Siempre vivirás en nuestros corazones» y «De los 9: Todo lo que hiciste, solo te seguirá» son algunos de los mensajes que se podían leer.

Y aplausos, dos minutos. Así, con unos cánticos en su honor, dio comienzo el funeral, al que apenas pudieron acceder los allegados más cercanos. Había tanta gente, que resultaba imposible pasar.

Al finalizar el acto, el cuerpo ha sido trasladado del Espacio de Culto al Cementerio, nuevamente entre aplausos, donde poco después tuvo lugar el entierro. «¡No te olvidamos!», «¡Valiente!», se oían gritos emocionados, a la vez que entrecortados.

Familiares, amigos y compañeros han estado presentes durante toda la jornada. También algunos visitantes, aunque la mayoría han optado por dejar espacio e intimidad a la familia en el momento del entierro.

Una hora después, con los ojos aguados y el semblante serio, los cuatro hijos y demás familiares de Spiriman han abandonado el lugar, rodeados de amigos y otros conocidos de Candel, que tras dos años de lucha contra un cáncer de pulmón, decía 'adiós' a Granada.

Jesús Candel comenzó a ser conocido a raíz de crear la fundación Spiribol, que fomenta un deporte patentado que ayuda a niños y jóvenes en situaciones vulnerables mediante el ejercicio físico. Así es como empezó su denuncia de la situación de la atención sanitaria en Granada tras la fusión hospitalaria.

También era el presidente de la asociación Justicia por la Sanidad, conocida principalmente por haber organizado numerosas manifestaciones y protestas en toda Andalucía, en las que en la última década han participado miles de personas.

Durante sus últimos meses de vida, Spiriman estuvo completamente volcado en la Unidad de Apoyo a Pacientes Oncológicos (UAPO), una fundación multidisciplinar dedicada a ayudar a pacientes oncológicos por medio del ejercicio físico y la fisioterapia.

Desde que anunció que padecía cáncer de pulmón con metástasis, sus publicaciones en redes sociales jan sido frecuentes. En ellas, informaba sobre su estado y evolución y animaba a otros pacientes que también padecen esta enfermedad.

Tras hacerse público su fallecimiento, las redes sociales se llenaron de mensajes que reconocían su constante lucha por la sanidad pública en Granada.

Además, como ya publicó este periódico, decenas de profesionales del Hospital Clínico San Cecilio de Granada despidieron el viernes al doctor Jesús Candel, Spiriman, tras la noticia de su muerte. Candel trabajó durante mucho tiempo en el centro hospitalario del PTS.

Sus compañeros quisieron rendirle homenaje con una concentración en que se guardaron varios minutos de silencio antes de romperlo con un aplauso generalizado. Entre los congregados se pudieron ver muchas lágrimas y abrazos sentidos.

Por la tarde, casi anocheciendo, profesionales del turno nocturno repitieron la concentración de homenaje, también a las puertas de Urgencias del hospital.

Asimismo, un numeroso grupo de personas se reunió esa misma noche, sobre las 20.00 horas, alrededor de la Fuente de las Batallas de Granada para rendir homenaje a Jesús Candel.