Así será la misa del nuevo arzobispo coadjutor en la Catedral de Granada

El nuevo arzobispo coadjutor entrará en la Catedral, acompañado por el arzobispo titular monseñor Martínez Fernandez, por la puerta principal de la Encarnación donde se les dará a besar el Lignum Crucis. Ambos se dirigirán hasta el altar mayor donde orarán en privado en sendos reclinatorios y después dirigirse a la sacristía para revestirse. De inmediato se iniciará la procesión mientras se entona el canto de entrada. En el comienzo de la misa se dará lectura a las Letras Apostólicas en una celebración que estará presidida por el arzobispo monseñor Martínez Fernández, como arzobispo metropolitano de la provincia eclesiástica de Granada, quien presentará su renuncia al Santo Padre Francisco el 20 de diciembre próximo. El prelado mandará que se presenten al Colegio de Consultores las Letras Apostólicas del nombramiento del nuevo prelado con carácter coadjutor, con derecho a sucesión. Continuará la celebración de la Eucaristía y tras la comunión el nuevo prelado se dirigirá a la asamblea que llenará el templo catedralicio. Un ritual que no se celebraba en Granada desde el 5 de junio de 2003 cuando tomó posesión el prelado Martínez Fernández.

La Catedral se abrirá a los fieles a las diez de la mañana para el acceso al interior. No hace falta acreditación alguna para acceder al interior, tan sólo para las autoridades incluidas en el protocolo de la Catedral. La misa estará solemnizada por el coro de Pueri Cantores y al final intervendrá la coral «Aral». Junto a Martínez Fernández celebrará el arzobispo coadjutor, hasta ahora obispo de la diócesis de Ávila de la que procede. Junto con ambos mitrados estarán otros otros treinta y seis obispos. En el presbiterio habrá tres cardenales, los de Valladolid, Valencia y el claretiano Aquilino Bocos; cinco arzobispos, de Valladolid, de Urgel y de Sevilla y los eméritos de Zaragoza y de Burgos. Además, tres obispos auxiliares procedentes de las diócesis de Madrid, Barcelona y Toledo.

En el presbiterio habrá hasta otros veintitrés mitrados procedentes de todas las provincias eclesiásticas y comunidades autónomas, estando todos los de la de Granada, Cartagena, Jaén, Málaga, Guadix y Almería -que forman parte de la provincia eclesiástica granadina- junto al primer secretario de la Nunciatura Apostólica en España en representación del Nuncio Apostólico, monseñor Bernardito Auza.

Una organización específica para esta ceremonia solemne permitirá que hasta 206 sacerdotes de las diócesis de Granada, Guadix y Ávila celebren en la misa estacional y se espera la asistencia de autoridades civiles de la provincia granadina y de algunas otras localidades con las que está o ha estado vinculado el nuevo prelado granadino. Durante la celebración eucarística habrá sacerdotes disponibles en la Catedral para administrar el Sacramento del Perdón.

El cabildo de la Catedral ha dispuesto la instalación de 1.500 sillas para que todos los granadinos que lo deseen puedan seguir la ceremonia en el interior del templo y se ha previsto también la instalación de cuatro pantallas gigantes de televisión distribuidos en la Seo granadina y se podrá también seguir a través de la retransmisión que realizará la emisora de la Conferencia Episcopal, Trecetv y por internet en la retransmisión de VATV, la Televisión Diocesana de Granada.

La diócesis de Granada seguirá regida por el arzobispo Martínez Fernández hasta que éste comunique su renuncia por razones de edad al Vaticano y seguirá ejerciendo como tal hasta en tanto se acepte la renuncia, que puede tardar aún varios meses después de firmarla el día que cumple los setenta y cinco años, tal y como manda el Código de Derecho Canónico tras el Concilio Vaticano II. El oficio de arzobispo coadjutor con derecho a sucesión lo tomará en la celebración el nuevo prelado que pasa inmediatamente a ser vicario general de la diócesis.Quedará destituido el hasta ahora mano derecha del arzobispo, Francisco Javier Espigares, que ejercerá otras tareas que le sean encomendadas en la diócesis.

El oficio de coadjutor está previsto en el referido Código de la Iglesia Católica para ayudar en la administración eclesiástica al titular de la diócesis. Su principal tarea es la de apoyar al titular y sustituirlo en caso de ausencia o impedimento para ejercer su gobierno pastoral. El derecho a sucesión supone que inmediatamente le sea aceptada la renuncia a monseñor Martínez adquiere de forma inmediata la facultad de arzobispo titular al quedar vacante la sede episcopal.

Tres son los arzobispos coadjutores que ha tenido Granada en su historia reciente. Emilio Benavent lo fue de Rafael García y García de Castro, en 1968; Fernando Sebastián fue nombrado de José Méndez veinte años después pero no llegó a la sucesión pues fue nombrado después arzobispo de Pamplona. Ahora es monseñor Gil Tamayo quien se convierte en el tercero que realiza este oficio hasta la vacante de sede.