El buen tiempo pone 'boina' a Granada
La calidad del aire empeora y el índice de polución se sitúa en 'amarillo' en seis días de lo que va de mes, aún lejos de los registros previos a la pandemia
La 'boina' vuelve a cubrir Granada. Esta neblina grisácea, una acumulación de gases y partículas que forma una especie de balsa entre las montañas que ... rodean a la capital y la Vega, es la constatación visual de una realidad que reflejan los medidores de calidad del aire: en los últimos días ha aumentado la contaminación en el Área Metropolitana. Es época de tráfico estable en las carreteras, de máximo uso de las calderas y, además, durante las últimas jornadas, de estabilidad meteorológica, una aliada de esta capa de polución.
El fenómeno que facilita el estancamiento de los gases sobre la silueta de Granada se llama inversión térmica. Una capa de aire frío se ha situado sobre la base de aire caliente en la ciudad, impidiendo que la polución 'escape'. El aire no se renueva y los contaminantes se acumulan, dando lugar a los picos de polución que registran los medidores.
En Granada capital hay dos estaciones que pertenecen a la red de la Junta: una en el Palacio de Congresos y otra en el distrito Norte, en la avenida Luis Miranda Dávalos. En la última semana, este segundo medidor ha arrojado datos en 'amarillo' –calidad del aire regular– durante todos los días, salvo el domingo, cuando se reduce el tráfico. El causante de esta situación es el dióxido de nitrógeno, gas emitido en procesos de combustión como los que impulsan a los vehículos. Hay que mirar hacia agosto para encontrar jornadas consecutivas con calidad regular e incluso mala, motivo, de acuerdo con los datos que difunde el propio Ayuntamiento, de las enfermedades respiratorias que sufren 35.000 granadinos.
Efecto Covid
No obstante, según la concejala de Medio Ambiente, Pepa Rubia, la situación dista aún de la de meses de enero previos a la pandemia, que ha reducido la movilidad y, en consecuencia, el tráfico. La estación Norte, que es la más expuesta a los óxidos de nitrógeno, registra en este inicio de 2021 los mejores datos de un enero en los últimos años. «Aunque haya habido días con concentraciones elevadas, tanto la media como los valores máximos que se han dado son inferiores a los de los demás años», explica IsmaelMotos, responsable técnico del área.
En definitiva se mantiene, pese a estos episodios, el 'efecto Covid', que se notó especialmente en abril y mayo. En la web del Ayuntamiento, el calendario de estos meses aparece totalmente en tonos azules: Granada respiró todos los días un buen o muy buen aire. En junio sólo hubo dos jornadas con índice 'regular'. Desde entonces, las cifras empezaron a ir a peor, certificando la influencia del tráfico en la presencia de contaminantes.
El portal de calidad del aire del Consistorio anticipa que la polución seguirá en índices altos, como es habitual en enero. No obstante, este miércoles regresan las nubes y la lluvia, que contribuirán a aliviar la situación.
Para entender con precisión el comportamiento de los gases contaminantes y las partículas en suspensión en la capital, el Ayuntamiento instalará 315 medidores, 8 de ellos en una fase 'piloto'. Permitirán discriminar por calles –identificando, por ejemplo, los efectos en las zonas de mayor y menor tráfico–, barrios o distintas fechas y horas. No harán mediciones 'oficiales', pero sí permitirán una radiografía al detalle de la contaminación en Granada.
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