El bebé hallado muerto en la planta de basuras de Alhendín era un varón recién nacido

Las fuentes consultadas por este periódico indicaron que el resultado de la autopsia determinará si el pequeño nació muerto o fue abandonado a su suerte con vida.

Tras recibir el aviso de los operarios de la planta, los miembros del instituto armado se desplazaron hasta las instalaciones en las que se reciclan las basuras de 174 municipios de Granada, incluida la propia capital, y, aunque los signos de que el neonato ya había fallecido eran evidentes, la Guardia Civil alertó entonces a un equipo médico, pero los sanitarios no pudieron hacer nada por él niño.

El dramático incidente obligó a cerrar una parte de la planta de tratamiento de basuras para que los investigadores pudieran desarrollar su tarea con minuciosidad e intentar localizar indicios que puedan servir para orientar sus indagaciones. Cuando concluyeron, la instalación recuperó su actividad

Los hechos se sucedieron de la siguiente forma: alrededor del mediodía, apareció el cuerpo inerte del recién nacido en las líneas de triaje de los residuos y, de inmediato, el trabajador que halló el cadáver detuvo las máquinas y telefoneó a la Guardia Civil.

Acto seguido, también se trasladaron hasta la planta miembros de la policía judicial del instituto armado, una ambulancia medicalizada, el forense, el juez, la letrada de la administración de Justicia y los operarios de la funeraria, según la información facilitada a este periódico por la Diputación Provincial de Granada, que es la institución pública de la que depende la instalación.

En estos episodios tan luctuosos, el protocolo prevé aislar del suceso a los empleados que no han tenido un contacto directo con el hallazgo para evitar que la conmoción se extienda al conjunto de la plantilla, explicaron los mismos medios, que también recalcaron que intentar saber en qué camión llegó del cadáver al vertedero es una tarea prácticamente imposible.

Por el momento, y al cierre de esta edición, no habían trascendido más detalles del suceso. Los agentes de la Benemérita llevan con absoluto sigilo sus pesquisas para tratar de aclarar lo ocurrido.

Esta es la segunda vez que aparece un recién nacido sin vida en la factoría de Alhendín. En 2018, los empleados descubrieron a una niña muerta dentro de una bolsa de basura. Estaba desnuda y conservaba el cordón umbilical. El cadáver fue detectado en la cinta transportadora donde se vuelcan los residuos que transportan los servicios de limpieza urbana de la ciudad de Granada y la provincia.

Tras una compleja investigación, la Guardia Civil, que contó con la colaboración de los expertos en ADN de la Policía Nacional, detuvo a la madre de la criatura y al abuelo de la fallecida.

Ya en 2020, la Audiencia de Provincial de Granada condenó a la mujer, que pertenecía a una familia desestructurada, a 25 años de cárcel por un delito de asesinato con alevosía y la agravante de parentesco.

El tribunal impuso al abuelo y padre de la homicida tres años prisión por abandono de menores.