Las bandas dedicadas a las estafas exprés ponen a la población mayor en la diana
Una de estas modalidades de delito ha recibido denuncias en Granada y Almería durante el pasado verano
Una mujer de 85 años acudió recientemente a una comisaría de Policía Nacional de Granada para informar de que le habían pedido 5.000 euros ... unos individuos haciéndose pasar por policías para liberar a una hija suya a la que tenían detenida después de un accidente de tráfico. La mujer acudió a un banco de la capital granadina para sacar el dinero. La empleada de la sucursal, alertada por la cantidad de dinero que iba a extraer de su cuenta corriente, le preguntó el motivo. Después le aconsejó que acudiera a una comisaría de policía para ponerlo en conocimiento de los investigadores. En realidad le habían pedido 20.000 euros, pero solo debía abonar ahora 5.000 y el resto después.
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Agentes de la comisaría centro de Policía Nacional de la capital llamaron por teléfono a la hija de esta anciana y hablaron con ella, lo cual permitió descartar un presunto secuestro o cualquier otro incidente. Los policías nacionales marcharon con la mujer de avanzada edad a su casa y allí esperaron a la persona que acudió a recoger los 5.000 euros. Le colocaron los grilletes y lo metieron en un coche policial rumbo a la Jefatura de Policía, donde quedó ingresado en los calabozos antes de pasar a disposición judicial. Este individuo tiene 49 años y tenía antecedentes policiales.
No es la primera vez que en Granada una persona mayor sufre un intento de estafa de este calibre. Fuentes policiales consultadas por IDEAL han comentado que en los últimos años se han registrado, al menos, dos intentos de estafas exprés con simulación de secuestros inexistentes. «Suelen ser personas que llaman desde otros países y se hacen pasar por secuestradores que piden un rescate para liberar a un familiar de la víctima», advierte la fuente policial consultada.
Una vez que los investigadores contactan con la presunta víctima del secuestro se desmonta el intento de estafa exprés. Los autores suelen encontrarse en otros países y a través de las redes sociales localizan a sus víctimas, por lo general población de avanzada edad, y se hacen con sus teléfonos para después intentar la estafa exprés. Solo en Granada, según las fuentes policiales consultadas, se producen una media de dos o tres denuncias al año por este tipo de estafas exprés.
También en Almería
Policía Nacional en Almería también ha detectado este tipo de estafas exprés y allí las denuncias han superado la decena. Los primeros casos se detectaron el pasado 13 de julio, y desde entonces se multiplicaron las denuncias en la comisaría de Almería por parte de personas octogenarias, que comunicaban que habían recibido una llamada telefónica en su teléfono fijo, de un varón que se hacía pasar por policía nacional. Durante la conversación telefónica, el estafador informaba a sus víctimas que su hijo había provocado un accidente, matando a una persona y que por ese motivo se encontraba en la cárcel, según advirtió la Policía Nacional de Almería el pasado verano.
Al parecer, tras la primera llamada, y para reforzar el engaño, la víctima recibía otra más, por parte de una segunda persona que decía ser un mando policial, el cual les pedía una fianza de 15.000 euros en unos casos, y hasta 25.000 euros en otros, para poner en libertad a su hijo.
Desde Policía Nacional en Granada aconsejan a los mayores tener mucho cuidado con estas estafas: desconfiar de estas llamadas telefónicas, contactar con la policía lo antes posible, no pagar ningún rescate e intentar hablar con el familiar que supuestamente está secuestrado. La población mayor es diana de muchas estafas por su vulnerabilidad ante estos delitos, de ahí que muchas charlas de Policía Nacional y Guardia Civil vayan dirigidas a este colectivo de mayores.
El teléfono como vía para captar a las víctimas
El teléfono se ha convertido en la vía de muchos delincuentes para contactar con sus víctimas. Generalmente, en nombre de una organización o bajo la excusa de que la persona ha sido beneficiada con un premio, se solicitan datos personales y financieros. Es importante estar alerta ante este tipo de comunicaciones porque la mayoría de las veces se trata de estafas que afectan el patrimonio y los bienes. Las personas mayores se han convertido en uno de sus objetivos. Por sus escasos conocimientos digitales son especialmente vulnerables a los fraudes conocidos como 'phishing'. Los expertos avisan de que la frecuencia de estos ataques se está incrementando notablemente.
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