El Ayuntamiento cambia de unidad a tres policías por acceder presuntamente al sistema Viogén de forma indebida
El Ministerio de Interior les inhabilita para el uso del programa, aunque solo uno de ellos está investigado formalmente por el juzgado
La Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior inhabilita a tres policías locales de Granada para el uso del Sistema de Seguimiento Integral ... en los casos de Violencia de Género (Viogén). La Dirección General de Coordinación y Estudios, responsable del programa de atención a las víctimas, ha recibido comunicación de la Guardia Civil de que los agentes «habían realizado accesos al programa que no se ajustan a los procedimientos establecidos en el marco de objetivos y finalidades del citado sistema». Por lo que, tras recibir la información de Interior y confirmarse la retirada de sus permisos de acceso al programa, el Ayuntamiento ha procedido al cambio de destino de estos individuos, que formaban parte del Grupo de Mujer y Menor (Grumume).
La falta de acceso a Viogén impide que los implicados puedan desempeñar sus funciones habituales, lo que ha llevado a la reestructuración del grupo. De acuerdo con el Consistorio, al quedar estos agentes inhabilitados para el uso del programa se ha puesto en marcha un proceso selectivo para incorporar a otros tres nuevos efectivos al Grupo de Mujer y Menor, «garantizando así la continuidad del servicio de seguimiento y protección de las víctimas de violencia de género». De los tres agentes trasladados, solo uno está siendo investigado por el Juzgado de Instrucción Número 4 de la capital.
La jueza, Susana Álvarez Civantos, investiga si agentes del cuerpo espiaron a la expareja de un subinspector de policía, acusado de malos tratos. La investigación se inició a raíz de la denuncia presentada en junio de 2024 por la víctima. La mujer expresaba que su exmarido, sobre el que pesa una orden de alejamiento de 500 metros y que acumula una decena de denuncias y detenciones por quebrantamiento, lograba acceder a ella y aseguraba que podría estar recabando información a través del sistema, o bien mediante el uso de las claves de su compañeros o con el acceso voluntario por parte de estos agentes.
«Consultas no autorizadas»
Por esta razón, la Guardia Civil solicitó una auditoría del sistema Viogén a la Secretaría de Estado de Seguridad. La Benemérita consideró que en el seno de la Policía Local de Granada se habrían formulado «consultas no autorizadas que evidenciaban un uso incorrecto del aplicativo porque agentes, que no son responsables del caso ni tienen adjudicada a la víctima». Un agente de la Policía Local de Granada habría consultado en hasta 37 ocasiones el expediente y se hacían incluso hasta ocho consultas al día. Por el lugar de residencia de la víctima, el seguimiento de Viogén corresponde únicamente al instituto armado y la Guardia Civil estima que las consultas efectuadas por los policía locales «están injustificadas». El subinspector de policía local, que fue designado jefe de estudios de la academia de policía en abril, tiene pendiente en los juzgados otra causa abierta por presuntos malos tratos. La fiscalía le pide seis años y diez meses de prisión por maltrato continuado, descubrimiento y revelación de secretos. Además, el individuo supuestamente 'espiaba' con un rastreador GPS a la mujer y extrajo sin consentimiento imágenes y documentos del ordenador y el móvil de la denunciante. El juicio está fechado para el mes de octubre.
La concejal de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Granada, Ana Agudo, asegura que la administración viene actuando con «la máxima diligencia para proteger a la presunta víctima y ha atendido rigurosamente las indicaciones judiciales respetando el estado de derecho, reitera su compromiso con la protección de las víctimas y con el estricto cumplimiento de la legalidad y los protocolos de actuación en materia de violencia de género». Por su parte, el subdelegado del Gobierno, José Montilla Martos, ha resaltado que tras recibir el aviso de la Guardia Civil el Ministerio del Interior actuó de manera «inmediata para proteger a la víctima».
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