La oposición advierte al bipartito contra el desgobierno

Los socialistas han sido los más insistentes en las quejas. Durante estos meses han acusado al bipartito de «inacción», de «prestar más atención a los sillones» y de deconstruir la Granada impulsada por Francisco Cuenca en el anterior mandato.

Con un gabinete en la sombra, a la manera británica, el portavoz del grupo se ha convertido en un auténtico azote que no ha dejado pasar tropiezos como el del soterramiento. Pese a todo, no dio problemas a PP y Cs en el pleno de Organización y ha tendido ya la mano para acordar los presupuestos.

En Podemos IU, que estrena grupo y líder, la labor de oposición se ha pospuesto en gran medida. Aunque en momentos puntuales, como en algunos instantes del pleno extraordinario de julio o las recientes comisiones, ha reprochado la «escasa» labor realizada por el bipartito, el portavoz de la confluencia, Antonio Cambril, ha mantenido un perfil bajo como muestra de respeto a la tradición de los cien días de gracia. Pese a ello, el engranaje no se ha detenido y la formación ha empezado a desplegar un programa amplio para atender a las reivindicaciones de los barrios.

Después de unas primeras semanas combativas, Vox ha venido manteniendo también un perfil bajo en los últimos dos meses. No han protagonizado actos, pero sí han aprovechado las comisiones para recordar sus exigencias al bipartito: transparencia y respeto a la legalidad. En sus manos está el futuro del gobierno.