El arzobispo, sobre la carrera oficial: «Empecé a ver que se cobraba por las sillas aquí; en Ávila no se hacía»
Monseñor Gil Tamayo espera no tener que intervenir en la polémica sobre la carrera oficial: «Sería una falta de confianza en las hermandades, y yo confío en ellas», dijo.
Uno de los temas que aparecieron sobre la mesa en el desayuno con periodistas que tuvo lugar ayer en el Arzobispado con ocasión del patrono ... de la profesión, San Francisco de Sales, fue el de la polémica sobre los itinerarios para la carrera oficial de cara a la próxima Semana Santa. Monseñor Gil Tamayo, el arzobispo, afirmó que espera no tener que terciar en el asunto. «Creo que las hermandades deben hacer honor a su nombre, y poner una solución como hermanos. No es lo mismo una cofradía que tiene su sede en el centro a otra que venga de la periferia. Entiendo que ya se hayan vendido palcos y sillas, pero en Ávila, de donde yo vengo, no se paga por ellas. El hecho de que aquí se cobren fue un descubrimiento que hice cuando llegué».
Insistió en el asunto y dijo que entrar en la polémica «revelaría una falta de confianza hacia las hermandades, y ahora mismo, mi confianza en ellas es plena». Pidió que no haya disputas, sino un consenso para ofrecer a los fieles y visitantes la mejor Semana Santa posible. Por otra parte, incidió en la importancia de que la vida cofrade se extienda al resto del año, creando una verdadera hermandad de creyentes, no de crédulos. «Para mí, las cuatro 'c' que deben cumplir las hermandades son: culto a sus titulares; cultura en el sentido de preservación de su patrimonio; caridad como compromiso social con los más necesitados, y catequesis, formación continua para quienes las integran», afirmó.
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