El arzobispo alerta de la presencia en Granada de un falso cura al que echaron del clero por ultra
El arzobispado hizo público un escrito en el que avisa de que el impostor ha dado misas en el Área Metropolitana
Se llama José Ramón Angulo y, en 2013, su nombre fue noticia porque desapareció sin dejar rastro de Arija, el pueblo burgalés en el que ... ejercía como sacerdote. Cuando el resto de clérigos de aquella provincia quisieron saber qué había sido de él, un responsable eclesiástico respondió lo siguiente: «Sobre esto ni me preguntéis. No puedo decir nada. Si alguien os pregunta, vosotros no sabéis nada», según recogió en el diario El Mundo-El Correo de Burgos. La contestación dejaba claro que José Ramón se había convertido en un problema para la Iglesia católica. De hecho, ya estaban en marcha los trámites para expulsarlo del clero. La razón: parece ser que se tendencia a mezclar su ideología ultraderechista con el sacerdocio.
En este sentido, la revista Interviú publicó un reportaje en el que vinculaba al padre Angulo, nacido en el municipio burgalés de Espinosa de los Monteros, con grupúsculos que reivindicaban la figura del dictador Francisco Franco. En 2009, durante la celebración en Santander del golpe de Estado que acabó con la democracia en España en 1936, Angulo despejó cualquier duda sobre su ideario extremista. «Ni el Ejército es lo que era, ni la Guardia Civil es lo que era, ni España es lo que era», dijo antes de hacer el saludo fascista y cantar el 'Cara al Sol', himno de la Falange.
Pues bien, tras varios años sin que nadie supiera dónde paraba, el exsacerdote José Ramón Angulo ha reaparecido en Granada y esta vez no ha pasado desapercibido. Ha sido el propio arzobispo, Francisco Javier Martínez, el que dio la alerta en un mensaje dirigido a todos feligreses. En ese escrito, avisa de la presencia de un falso sacerdote que está celebrando actos de culto y celebraciones litúrgicas en nombre de la Iglesia Católica en pueblos del área metropolitana de Granada, algo para lo que, como es lógico, no estaría autorizado.
El comunicado señala que existe el riesgo de que el impostor pida aportaciones económicas a los fieles y detalla que se trata de un «exclérigo reducido al estado laical por la Santa Sede», al considerarlo la Iglesia «como no idóneo para el ejercicio del sacerdocio». Su nombre: José Ramón Angulo.
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