Un vuelco entre clanes destapa cinco plantaciones de marihuana en Alhendín y Churriana

Hasta el momento tres personas han sido puestas a disposición judicial como presuntas autoras de un delito de cultivo y elaboración de droga y de un delito de defraudación de electricidad.

En la primera fase de esta operación, el pasado día 14 de mayo los investigadores de la Guardia Civil de Armilla desarticularon dos centros de cultivo de marihuana en Alhendín y se incautaron de seiscientas diez (610) plantas.

La consecuencia inmediata de ello ha sido que el clan que perdió dichas plantas intentó dar un vuelco de marihuana el pasado día 24 de mayo y recuperar sus plantas a costa de otra familia de Alhendín a los que amenazaron, según han denunciado, con armas de fuego. Estos últimos llamaron a la Guardia Civil y varias patrullas de la Compañía de Armilla acudieron rápidamente para atender la llamada de auxilio de esta familia.

Los agentes se desplegaron por la zona, no encontraron armas de fuego, pero sí que observaron que la puerta de la casa vecina a la de la persona que había llamado a la Guardia Civil denunciando las amenazas, había sido violentada y estaba abierta, y dentro se veía una plantación de cannabis sativa. Los investigadores de Armilla averiguaron que dicha vivienda y la plantación eran de la denunciante.

Esto desencadenó la segunda fase de la operación. Se realizaron seis registros domiciliarios y se desarticularon cinco centros de producción de marihuana, cuatro en Alhendín y uno en Churriana de la Vega, pertenecientes a un mismo clan familiar en los que se intervinieron trescientas ochenta (380) plantas de cannabis sativa en avanzado estado de crecimiento y floración en el primero; doscientas noventa (290) en el segundo; doscientas siete (207) y 200 gramos de marihuana en el tercero; ciento ochenta plantas (180) en el cuarto y 1,2 kilos de cogollos de marihuana dispuestos para la venta en el quinto.

Los agentes también descubrieron seis dobles acometidas ilegales a la red eléctrica que los técnicos de la compañía suministradora aprovecharon para desmantelar sin miedo a ser agredidos.

La Guardia Civil ha abierto una nueva operación para investigar las amenazas denunciadas y la posible existencia de armas de fuego en poder de los denunciados.

Esta operación de la Guardia Civil de Armilla se incardina en la operación Miller, una operación que está desarrollando la Guardia Civil a nivel nacional contra el cultivo y tráfico ilegal de marihuana.