El motivo por el que ha desaparecido uno de los coches Seat de la rotonda de Churriana
Los vecinos de la localidad granadina han echado en falta uno de los dos vehículos que componen esta peculiar escultura
D. C.
Lunes, 2 de junio 2025, 11:12
El municipio granadino de Churriana de la Vega lleva unos días sin uno de sus símbolos más característicos. Uno de los coches que conforman la ... famosa 'rotonda de la Seat' ha desaparecido, lo que ha llevado a los vecinos a preguntarse qué ha ocurrido con el vehículo. Situada en la carretera que atraviesa la localidad, esta rotonda se erigió como un «homenaje al 600», uno de los coches más míticos de España.
Con los llamativos colores naranja y azul, estos dos coches 'atravesaban' la rotonda por encima, llamando la atención de cuántos pasan por la zona. Sin embargo, en los últimos días uno de estos coches se ha quedado 'solo'.
El motivo, de acuerdo con el Ayuntamiento de Churriana, no es otro que la necesidad de pintar el vehículo. Es decir, se trata de una cuestión de mantenimiento. En cuestión de días, la rotonda lucirá su aspecto habitual. Un poco más renovado, de hecho, gracias a la mano de pintura. Desde el consistorio churrianero apuntan que se ha retirado uno de los vehículos para pintarlo y en breve retirarán el segundo también. Se van a pintar de azul y amarillo, como los colores de la bandera del municipio.
Un histórico
El Seat 600 fue el coche que contribuyó a motorizar España. El vehículo se lazó al mercado en 1957, y tenía un precio aproximado de 63.000 pesetas, lo que hoy en día serían unos 378,54 euros. En la Zona Franca se fabricaron nada más y nada menos que 800.000 unidades de un coche que con una potencia de 18 a 25 CV (según versiones) era capaz de recorrer cientos de kilómetros con toda la familia a bordo, sus maletas, y alguna que otra mascota, hasta llegar al destino vacacional.
Inicialmente, el SEAT 600 contó con un motor de 633 cc de cilindrada y 18/20 CV -que se mantuvo en producción durante seis años-, para pasar posteriormente a las versiones D, E y L-Especial con 767 cc, -subiendo su potencia a 25 CV y posteriormente a 28 CV-, que ocuparon los diez años restantes de la andadura del 600. Pero en 1966 la marca dama un paso adelante, con la presentación del SEAT 850, que llegó al mercado con la intención de «dar un paso más». Los ciudadanos de clase media notaban las consecuencias del despegue económico, y por lo tanto podían aspirar a un «plus», como el que ofrecía el nuevo modelo.
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