Homicidio en Granada
El fallecido en Atarfe murió de un disparo en la cabezaEl presunto autor entregó el arma con el que supuestamente cometió el crimen, una pistola
El hombre de 34 años fallecido en Atarfe este martes recibió un disparo en la cabeza, según ha podido saber este periódico, y el arma ... empleada fue una pistola. Fue trasladado al centro de salud de Atarfe tras lo sucedido, donde trataron de reanimarlo, sin éxito. La autopsia y la investigación determinarán si recibió uno o más disparos.
El presunto autor del crimen es un joven de 23 años de edad que se entregó en la comandancia de la Guardia Civil de Atarfe. Se trataría del hermano de Alejandro Muñoz, un joven de 25 años que desapareció en ese mismo pueblo hace medio año. En su día la familia aseguró que no se había ido voluntariamente, sino que podía tratarse de un ajuste de cuentas.
Tanto el detenido como el fallecido tenían antecedentes penales y ambas familias están enfrentadas desde hace años. Además, residen en la misma zona, la barriada de El Barranco. Según han señalado fuentes de la Guardia Civil, allí fue donde se cometió el crimen con una pistola que el presunto autor entregó cuando se personó en la comandancia.
Previsiblemente pasará a disposición judicial este jueves o viernes. Mientras, permanece detenido en los calabozos de la Guardia Civil. Aún no ha trascendido el motivo de la agresión mortal, que está siendo investigada por la Benemérita.
Seis meses desaparecido
En cuanto al desaparecido, Alejandro Muñoz, se le perdió la pista el pasado 13 de julio en Atarfe. De acuerdo con la información difundida por SOS Desaparecidos, mide 1,75 y tiene pelo negro y ojos marrones. Su familia se concentró en días posteriores para pedir que se intensificase la búsqueda y aseguró que no se había ido de forma voluntaria, sino que podía tratarse de un ajuste de cuentas. El rastreo por parte de la Guardia Civil se desplegó, entre otras zonas, en el entorno del pantano del Cubillas, sin éxito.
Momentos de tensión
El crimen de este martes tuvo lugar sobre la una y cuarto de la tarde. En Atarfe se vivieron momentos de tristeza y tensión tras comunicarles a los familiares la noticia. Los gritos de impotencia y rabia enmudecieron la calle. «Me han matado a mi marido, no puede ser», decía su mujer entre llantos.
Por su parte, el subdelegado del Gobierno en Granada, José Antonio Montilla, recalcó ayer que esta provincia es «segura» y cuenta con un índice de criminalidad nueve puntos por debajo de la media nacional. Lanzó de este modo un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía tras encadenarse en los últimos días varios hechos violentos; como la muerte de un hombre apuñalado en una calle de la capital, un tiroteo con un herido en Camino de Ronda y este homicidio de Atarfe.
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