Churriana reordena el tráfico para la llegada de la obra del metro a su vía principal
En marzo está previsto que los trabajos del metropolitano se adentren en San Ramón, después de habilitar Santa Lucía para que absorba el tráfico
Churriana de la Vega tiene una zanja abierta que quiere cerrar para comenzar las obras del metro por la calle San Ramón, la arteria principal ... del municipio. La construcción del colector que recogerá las aguas residuales para llevarlas a la depuradora de los Vados ha tenido en jaque al municipio algunos meses. Lo que ha estado patas arribas es el llamado vial, o Avenida Cristóbal Colón, una especie de circunvalación que une el municipio con Armilla y reparte numerosas calles residenciales. Ahora, en pocas semanas, se cerrarán los boquetes y esta vía que reparte el tráfico por el municipio volverá a estar en funcionamiento.
Las obras del colector que transportará las aguas residuales de Churriana de la Vega terminarán antes de lo previsto. Se ha procurado ajustar los plazos porque tener el vial despejado era vital para iniciar los trabajos del metro en la calle San Ramón.
El alcalde de Churriana, Antonio Narváez, explica que las obras del metro se centran ahora en preparar la calle Santa Lucía, que hasta ahora era de un sentido en dirección Cúllar Vega, y hacerla de dos sentidos para que sea la gran protagonista a la hora de rediseñar el tráfico durante los trabajos. Por eso, le están ganando ancho, quitando aparcamientos y acondicionándola para que quepa también las líneas metropolitanas como son la 150 y la 156. «Para que tengan capacidad de paso los autobuses se ha seccionado la plaza Maestro Antonio Agustín, que después recuperará su forma», indica el regidor.
También hay trabajos en la carretera de Alhama, donde irá situada la parada San Cayetano, próxima la base aérea de Armilla, donde se está realizando la mudanza de árboles. «Como ahora es la época, se están transplantando árboles en diferentes zonas verdes del municipio», aclara el alcalde.
Donde todo está preparado para empezar a dibujar la calzada y la vía del tren es en la parada del Parque de la Paz, que espera la organización de las redes tanto eléctricas como las tuberías, que tienen que reestructurarse a los lados de la calzada, ya que debajo de las vías no puede ir ningún servicio.
Las obras del metro, según informan desde la Consejería de Fomento, están en fase de trabajos previos que consiste en desviar los servicios afectados, adecuación de acerados para habilitar nuevos itinerarios de tráfico y la retirada y transplante de árboles. También se han efectuado los proyectos que sirven como medidas cautelares arqueológicas, con la tramitación en cultura. Además están auscultando en las fachadas de las viviendas colindantes al trazado.
Nervios ante las obras
Cuando las obras del metro terminen la calle Santa Lucía acogerá a los coches que vayan en sentido Armilla y San Ramón, que tendrá un vial para vehículos, los que vayan hacia Cúllar Vega. En la calle San Ramón, tal y como apunta el alcalde, se tomarán todas las precauciones para que los trabajos del metro afecten lo menos posible. «Pero como dijo Juanma Moreno: para hacer una tortilla hay que romper los huevos», anota el regidor que resalta que, aunque serán molestas las obras, la llegada del metro a Churriana revolucionará el municipio. «Los comerciantes de esta calle están nerviosos y es normal. Les vienen recuerdos de cómo fueron las obras por Granada capital pero estas no tienen nada que ver porque son en superficie y porque además, está el dinero para hacerlas y tienen un plazo tope para poder recibir la subvención europea que es diciembre de 2025».
Narváez señala que las obras van bien, «poco aceleradas» pero que por ahora esto cuadra con los planes de tener el vial abierto. A finales de febrero o principios de marzo, según los cálculos iniciales, se terminarán las obras de la Avenida Cristóbal Colón y entrarán los trabajos del metro en la calle San Ramón.
Las obras de la segunda fase de la ampliación del metro, están a punto de adjudicarse. El alcalde de Churriana señala que, pese a empezar después, podrán terminar antes que las de la primera fase porque son más sencillas. «Son en línea recta y en una zona donde no hay vecinos por lo que los trabajos podrán ir más rápido», manifiesta.
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