Apoyo «sin fisuras» del PSOE de Granada al presidente del Gobierno

José Entrena ha sido uno de los nueve firmantes de la carta con la que los secretarios generales del PSOE de Andalucía se han situado junto a Pedro Sánchez. Encabezados por Juan Espadas, como máximo líder socialista en la comunidad, los representantes de Almería, Cádiz, Córdoba, Huelva, Jaén, Málaga, Sevilla y Granada han expresado su apoyo al presidente y el «rechazo rotundo» a lo que califican «situación de acoso político personal» por parte del PP y Vox «de forma reiterada en el tiempo y, en especial, con las declaraciones efectuadas estas últimas semanas por sus máximos responsables».

Entrena, junto al resto de representantes, ha llamado a la reflexión y ha pedido a la ciudadanía que analice «hasta qué punto podemos tolerar esta violación permanente del respeto a los derechos y la dignidad de las personas dedicadas a la política y, aún peor, sobre la de sus familiares y allegados».

El dirigente se ha dirigido a Sánchez, a quien ha solicitado, como sus homólogos, que continúe trabajando por la convivencia en este país, la dignificación de las instituciones y todo aquello que beneficie a la vida de la gente, además de construir una España que avance en igualdad, democracia y justicia social«.

A juicio de Entrena y el resto de firmantes, «ahora más que nunca es hora de estar unidos para plantar cara a la derecha y la extrema derecha que, cuando no tienen mayoría parlamentaria para gobernar, intentan subvertir la situación deslegitimizando y debilitando al gobierno de turno y a las instituciones y, con ello, a la democracia».

El diputado José Antonio Rodríguez Salas ha mostrado su comprensión con lo experimentado por Sánchez, de quien ha elogiado su trabajo «incansable» por el país. A su juicio, es entendible «necesitar tiempo para reflexionar cuando se cruza la frontera inhumana de atacar a lo que más quieres, a tu familia» y ha insistido en que «hay límites que no deberían permitirse ni en política y tampoco en la vida».

También ha realizado declaraciones la diputada Olvido de la Rosa, quien ha asegurado que «no todo vale» en política. La dirigente ha reconocido que está «muy preocupada» por la situación de «acoso» que padece el presidente y su familia «desde que el Gobierno legítimo se constituyó», unos «continuos ataques» de los que ha responsabilizado «a la derecha y la ultraderecha».

Para la dirigente, la justificación de esta situación reside en que hay «sectores» que «no admiten que haya un gobierno progresista que haga avanzar al país y a la ciudadanía y, como tienen programa que explicar y sí mucho que tapar, atacan al presidente alcanzando límites insospechados, presentando denuncias falsas contra su mujer que incomprensiblemente son admitidas por un juez».

De la Rosa ha dicho que «entiende la decisión» de Sánchez. En su opinión, «todos somos personas y tenemos sentimientos» y ha mostrado su esperanza en que «este tiempo sirva para que todosr eflexionemos de manera colectiva sobre el rumbo que ha tomado la política». Sobre el presidente, le ha deseado que «tome fuerza y siga resistiendo por el bien del país» y ha asegurado que «cualquier decisión que tome» sobre su futuro al frente de España la respetará.

El portavoz del grupo municipal socialista, Paco Cuenca, también ha respaldado al presidente del Gobierno en una situación que «entiende». El representante se ha referido así a lo sucedido con la denuncia que sufrió años atrás y que, más de un lustro después, tras un larguísimo proceso, quedó archivada. «Yo lo viví en mis carnes, en mi casa y sé perfectamente lo que está pasando porque en una situación así hay padres, madres, hijos y eso hace que te lo cuestiones todos», ha recordado.

El socialista ha mostrado su «apoyo y solidaridad» tanto a Sánchez como a su esposa, Begoña Gómez, y ha señalado directamente a «la derecha y la ultraderecha», a los que ha responsabilzado de generar «una dinámica forzada para convertir todo en bronca, insultos y basura». A su juicio, «esto debe hacer reflexionar a los españoles porque hay mucho en juego; no se puede aguantar más insultos, mentiras y amenazas».