Edición

Borrar
Rafael Jiménez, Mabel González y Néstor Hernández cuentan su experiencia. IDEAL
«A los andaluces nos toman como gente de segunda»: Profesores de Granada y Castilla y León responden a Tejerina

«A los andaluces nos toman como gente de segunda»: Profesores de Granada y Castilla y León responden a Tejerina

La comunidad educativa muestra su disconformidad con el discurso de la exministra sobre el nivel educativo de los alumnos del sur de España

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Jueves, 1 de enero 1970

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

«En Andalucía te dicen que lo que sabe un niño de diez años es lo que sabe un niño de ocho en Castilla y León». Las palabras de la vicesecretaria de Acción Social del PP y exministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, cayeron como una tromba en la comunidad educativa. En su discurso, Tejerina aseguró que existe un «deterioro» en la educación que hace que haya diferencias entre las comunidades, como es el caso de Castilla y León y Andalucía, donde, según la exministra, los niños castellanoleonenses aventajan en dos años a los andaluces. Los comentarios a pie de calle y en las redes sociales no dejaron de desarrollarse en toda la jornada de ayer con una línea compartida de que las palabras de Tejerina eran erróneas y malintencionadas.

Mabel González (Castilla y León)

«Tenemos pocos recursos, pero nos implicamos»

Mabel González, profesora de Secundaria de Física y Química y miembro del sindicato CSIF, ha dedicado más de una década de su vida laboral a la enseñanza en Castilla y León. «La implicación de los profesores de allí y los de aquí son igual y los alumnos se esfuerzan lo mismo». Según asegura, el punto de partida de las palabras de la exministra está en los resultados del informe PISA, una prueba voluntaria que «muestra las competencias, no los conocimientos». «Cada 30 puntos de diferencia que hay entre las calificaciones de una comunidad y otra se considera un curso escolar y entre Castilla y León y Andalucía hay más de 30 puntos, lo que se correspondería como un curso y medio de desfase», añade. González quiere dejar claro que estos datos nunca podrán decir que los alumnos de un entorno y otros son peores o mejores, sino que quienes se han presentado han obtenido esa calificación. «Deberían mirar factores como las ratios de las clases, los cambios que provoca el clima en la atención de los alumnos, el posible mayor absentismo escolar por poder acceder antes al mercado laboral u otros muchos aspectos que no se estudian», afirma.

González resalta la implicación de los profesores y cómo eso incentiva a sus alumnos: «Tenemos pocos recursos, por lo que los profesores nos comprometemos más e intentamos llenar ese hueco que queda en las clases incluso trayendo nuestros propios materiales. Pero supongo que los profesores de Andalucía serán igual». Además, explica que los profesores pasan por distintas comunidades, por lo que no cree que «un profesor sea brillante en Castilla y León y deje de ejercer bien al llegar a Andalucía».

Rafael Jiménez (Granada)

«A Andalucía se le ha infravalorado siempre»

Para Rafael Jiménez García, docente y director del IES Escultor Sánchez Mesa de Otura, las declaraciones de la exministra han sido «muy desafortunadas» y muestran una imagen que no existe. «La preparación que nosotros damos no tiene nada que envidiar a las demás. No hay razón para las palabras de Tejerina», sentencia. En su opinión, incluso se atrevería a decir que los alumnos con los que él ha tratado están «más preparados que los que vienen de Despeñaperros para arriba».

El origen de este tipo de pensamientos se centra, según Jiménez, en la percepción negativa que se tiene de los andaluces en el resto del territorio: «A Andalucía se le ha infravalorado siempre, no solo en educación, sino en todos los niveles y aspectos. Nos toman como gente de segunda». A esto añade: «Cuando se nombra a Andalucía es para tirarla por los suelos. Esto es algo desafortunado e irreal». Para él, los informes de PISA cuentan con escasa validez, pues se centran meramente en los resultados de un examen volutario y aleatorio: «Estas pruebas no nos dicen nada de cómo están preparados los niños. No dan una imagen clara y real sobre las aulas. Tenemos claro que cuando nuestros niños salen, vayan donde vayan, son futuros ingenieros, médicos, de todo, como cualquier otro».

Néstor Hernández (Castilla y León)

«Habría que evaluar otros factores en las pruebas»

Néstor Hernández lleva a cabo su actividad actualmente en un colegio de Castilla y León, pero anteriormente ha sido docente durante cuatro años en Andalucía. Su cercanía a ambos territorios le hace ser tajante sobre las declaraciones vertidas por Tejerina: «Son una salida de tono, unas palabras hechas con falta de rigor».

En su opinión, hay muchos factores que informes como PISA no tienen en cuenta al evaluar a los alumnos de las comunidades autónomas, como son características culturales, sociales o económicas propias de cada entorno. «No es tan fácil como decir que los niños de Castilla y León están por encima de los andaluces, porque eso no es real. Las pruebas no miden todos los factores. No muestran, por ejemplo, de qué base parte cada niño», asevera. Además, indica que cada caso concreto es distinto y señala como ejemplo el hecho de que en muchas familias un hijo saque mejores notas que otro aun contando con los mismos recursos. «Si existiese una receta exacta que hiciera que los niños sacaran buena nota la tendríamos en toda España, pero no, hay que ver cada caso en concreto y lo que me vale a mí puede que no le valga al del colegio que hay a 200 metros. Lo que sí deberían hacer es unificarse los aspectos educativos y que no cambiaran las leyes con cada gobierno».

Carmen (Granada)

«Las calificaciones en Andalucía son excelentes»

«En Andalucía se está educando siguiendo la normativa propuesta y se está evaluando según los estándares del Gobierno. Se están consiguiendo buenos resultados en la aulas, o al menos ese es mi caso, por eso no veo ningún sentido a esas declaraciones». Quien habla es una profesora de Economía y Formación Profesional de Granada que prefiere no dar su nombre. Según su experiencia en aulas de la provincia, en la comunidad autónoma se enseña desde la experiencia, lo que contribuye a una mejor asimilación de los conceptos. «A los andaluces siempre se les ha concebido como inferiores en el tema educativo. Una de las ideas que siempre se ha vendido es que los exámenes como selectividad o las oposiciones aquí son más fáciles, pero la verdad es que en el futuro, muchos de estos alumnos irán a trabajar fuera de Andalucía y, si no tuvieran el nivel necesario, no tendrían ningún futuro en estos lugares. De aquí salen niños preparados que luego desarrollan su labor profesional de forma excelente», recalca.

Todos ellos están de acuerdo en un mismo pensamiento: todo esto podría mejorar con un pacto educativo que perdurase a pesar de los cambios de gobierno. Así lo destaca Mabel González: «En pocos años hemos tenido como tres o cuatro cambios de leyes y eso hace que haya muchos desconcierto en profesores y alumnos. Si se hiciese un pacto educativo en el que tanto izquierda como derecha y los de arriba y abajo se obligaran a mantener en el tiempo, se conseguiría acabar con estas distinciones entre comunidades». Por ello, quieren que sus aulas estén al margen de cambios de signo para poder educar con unidad y coherencia en todo el territorio.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios