La Alhambra refuerza las medidas de protección para personal y visitantes por el calor

En el marco de su Plan de Autoprotección (PAU), el Patronato ha adoptado una serie de actuaciones dirigidas a minimizar los riesgos asociados a la exposición prolongada al calor en el entorno laboral, especialmente para quienes trabajan al aire libre.

Una de las principales novedades es la incorporación de chalecos refrigerantes, cuya eficacia se está comprobando en una prueba piloto con 30 personas voluntarias. Estos chalecos se activan fácilmente sumergiéndolos en agua y ofrecen frescor, ayudando a mantener una temperatura corporal estable incluso en las condiciones de trabajo más exigentes.

Además, se entregan toallitas refrescantes que se activan también con agua y proporcionan alivio inmediato en las zonas del cuerpo donde se aplican, ideales para momentos de descanso y recuperación.

Complementando estas soluciones, se han entregado pulseras de detección térmica que monitorizan en tiempo real la temperatura corporal y alertan ante posibles riesgos, facilitando una respuesta rápida para prevenir el agotamiento o golpes de calor.

Se han reorganizado horarios y tareas para favorecer la rotación, las pausas frecuentes y el acceso a zonas con sombra y espacios climatizados durante los descansos. También se han instalado carpas, ventiladores portátiles, toldos, lonas y sombrillas en áreas de trabajo al aire libre, y se ha intensificado el reparto de agua embotellada, crema solar, ropa adecuada y botiquines actualizados.

Desde Prevención de Riesgos Laborales se promueve la hidratación constante, el uso de ropa holgada, gorra o sombrero, tejidos transpirables y protección solar. Se presta especial atención a colectivos sensibles como mayores de 55 años, personas con patologías previas o en tratamiento médico y mujeres embarazadas. Se fomenta además la supervisión mutua para detectar síntomas de agotamiento, calambres o deshidratación, desaconsejando el trabajo en solitario.

El compromiso del Patronato también abarca a quienes visitan la Alhambra. Para ellos, se han instalado lonas y sombrillas en puntos estratégicos del conjunto monumental, ofreciendo sombra y protección para una estancia más cómoda y segura durante la visita.

Estas intervenciones forman parte de un plan más amplio de adecuación de espacios y servicios, buscando mejorar la calidad de la visita en condiciones de altas temperaturas.