Las agencias de viaje de Granada no logran salir de la crisis
Este negocio agrupa a más de un centenar de trabajadores en la provincia que continúa en suspensión de empleo
El de las agencias de viaje es uno de los sectores más castigados por la crisis económica provocada por la covid-19, y uno de ... los que más está tardando en recuperar una cierta normalidad. De hecho, por este motivo ha sido señalado como el primero que se enfrentará a la activación del conocido como Mecanismo RED, la herramienta que viene a sustituir a los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) habilitados durante la pandemia. En la provincia granadina, 114 trabajadores asociados a estas actividades siguen todavía en sucesión de empleo, según los datos más recientes de la comisión tripartita que recoge las cifras de seguimiento en este sentido y de la que forman parte el Gobierno, los agentes sociales y las organizaciones empresariales, que alcanzan hasta el pasado 18 de febrero. La principal preocupación del sector es la tardanza en la recuperación del turismo de origen extranjero, a lo que ahora hay que sumar la difícil coyuntura que se vive en Ucrania y que puede trasladarse a buena parte de Europa del Este.
El de las agencias de viaje es el segundo sector con mayor número de personas en ERTE en la provincia y supone hasta el 8,2% del conjunto, solo por detrás de los hoteles y otros alojamientos similares, que duplica su cifra con creces su cifra de afectados hasta alcanzar los 354, uno de cada cuatro. La evolución de esta cifra en los últimos meses de una idea de las turbulencias que se vive entre estas empresas, ya que solo se ha reducido en un 44% entre el 14 de mayo de 2021 y el pasado 18 de febrero. Por contra, entre los hoteles la cota alcanza los 77,2 puntos, y es incluso más alta en el caso de los restaurantes (-90,4%) y los establecimientos de bebidas (-93,4%). De entre las diez categorías de actividad con mayor número de empleados en suspensión de empleo en Granada, solo el comercio al por mayor no especializado ofrece una evolución peor (-20,4%), probablemente lastrado por la crisis que continúa afectando al transporte y la logística.
«No hemos podido rescatar a toda la plantilla del ERTE porque ha habido algo de actividad, pero muy por debajo de lo mínimamente aceptable»
Ángel García
Propietario de una agencia de viajes
Ángel García, propietario de una agencia de viajes en la capital granadina, certifica la mala situación. Tiene un ERTE activo desde la declaración del estado de alarma en marzo de 2020 y solo ahora, a partir del próximo 1 de marzo, espera empezar a reincorporar a su plantilla al trabajo presencial. Pese a todo, observa el futuro todavía con reservas. «No hemos hecho cambios hasta el momento porque no ha habido ninguna estabilidad en términos de demanda turística; ha habido algo de actividad, pero muy por debajo de lo mínimamente aceptable», explica el empresario, quien evalúa además el desarrollo de los acontecimientos en Ucrania. «Cuando parece que el tema sanitario se esta empezando a digerir como algo que se puede llevar y volver a algo parecido a una normalidad, aparece otro virus en forma de guerra que nos puede afectar de manera muy notoria, porque toda la zona del Este de Europa se puede ver afectada», se lamenta. Por esta razón, García todavía no se plantea reincorporar a toda su plantilla de manera completa. «Todavía no hay actividad suficiente», resume.
Coincide en el diagnóstico de situación Juan Peláez, presidente de las agencias de viaje de Granada, quien en conversación con este periódico afirma que la prórroga de los ERTE en el sector, y su inclusión en el nuevo Mecanismo RED, es «estrictamente necesaria». «Somos el sector que peor está aún en términos de recuperación de personal», señala. «En comparación con hoteles o compañías aéreas, ellos tienen de vuelta a casi todo el mundo, y solo queda por volver entre el siete y el ocho por ciento, mientras que a nosotros nos queda un 29%» a nivel nacional. La cifra en Granada es incluso más alta, «porque está muy centrada en la atención a extranjeros; podemos estar en el entorno del 40%», detalla Peláez.
Aunque celebra la continuación de la herramienta del ERTE, el presidente de las agencias de viaje alerta de que el principal problema estriba en la rebaja de las exoneraciones para el empresario en comparación con el antiguo sistema. «Hemos expresado la importancia de que esa exoneración aumente» en negociaciones con el Gobierno, argumenta, «porque si no hemos sido capaces de recuperar al personal por falta de productividad no podemos a hacer frente a esos costes», y confía en que el Ejecutivo sea sible a sus demandas. en este sentido.
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