Las obras del paso ciclopeatonal entre Armilla y Granada entran en la recta final
Los trabajos se centran ahora en terminar la estructura cubierta, la parte más compleja, y solo queda ya hacer el vial en su parte exterior
Las obras del paso ciclopeatonal de Armilla han entrado ya en su recta final. En pocos meses, se podrá cruzar a pie y llegar del ... Centro Comercial Nevada al hospital Clínico San Cecilio por este vial para bicicletas y peatones, que acabará con todos los cruces temerarios de la autovía que se producen a diario.
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La obra ha sido compleja pero ha salvado ya su parte más difícil: la construcción del cajón por el que se pasará bajo la autovía GR-30. El paso ciclopeatonal tiene una parte exterior que llega hasta la rotonda del Nevada con Armilla y hasta la del PTS. Esa parte será sencilla de construir porque se trata casi de un carril bici al uso pero con una parte dedicada a los peatones. Será la segunda fase de la obra, a la que se le meterá mano en breve, según cuentan fuentes de la Consejería de Fomento.
La primera fase toca a su fin después de haberse salvado pese a las complicaciones. Esta ha consistido en la construcción de la parte del paso ciclopeatonal que va bajo la autovía. Para salvar la carretera se ha construido una especie de túnel pero muy amplio y con una parte al aire libre para que no dé esa sensación de que se camina por una estructura cerrada.
La primera parte fue la del cajón hincado, es decir, metido sin cortar el tráfico de la autovía ya que soporta 100.000 vehículos diarios. Con esta técnica, es el primer cajón que se hinca así en Andalucía. Por la deficiente calidad de los materiales en el suelo de la autovía surgieron complicaciones y deformaciones del firme que se fueron arreglando y que se terminarán de reparar con un repaso final que se le dará a la calzada de la GR-30.
El segundo cajón fue empujado y para eso sí se cortó el ramal de la autovía, se rompió y se reconstruyó tras poner la caja por donde va el paso ciclopeatonal.
Ahora se trabaja en la estructura intermedia entre ambos cajones, una superficie en U, de hormigón desde la que sí se ve el techo y que tendrá paredes para retener el talud de la autovía. Según exponen desde la Consejería de Fomento, también se está actuando en la canalización de las aguas pluviales, para lo que se ha tenido que desviar una acequia al otro lado del ramal. Cuando se termine la parte que va por el cajón se instalarán luces de leds y se le pondrá mobiliario urbano de forma que se quede un paseo con carril bici y con zona para los peatones. El carril bici está pensado que conecte con las vías ciclistas tanto de Armilla –ya proyectada– como de la zona del Parque Tecnológico de la Salud.
Cinco metros de ancho
La sección del vial será de cinco metros de anchura para albergar tanto la vía para uso ciclista como una segunda calle para el tránsito peatonal, con una anchura de 2,5 metros para cada uso. Las bicicletas convivirán con los peatones en carriles que discurrirán de manera paralela. La pendiente del trazado no supera nunca el 6 por ciento y la anchura nunca será inferior a los 2,5 metros, por lo que se cumplen los requisitos para considerarla una vía ciclopeatonal accesible para todo tipo de usuarios.
La conexión ciclopeatonal, con una longitud de 757 metros, discurre en su mayoría por suelos bajo dominio público ferroviario y su trazado es prácticamente paralelo a la línea del Metro de Granada, entre las paradas de Parque Tecnológico y Sierra Nevada.
Dado que la vía ciclopeatonal discurre íntegramente por el término municipal de Armilla, el proyecto prevé la integración urbana, de forma que el peatón y el ciclista hagan uso de la vía de forma natural. De esta forma, se han incluido zonas ajardinadas, árboles de sombra, aparcabicicletas y otros servicios.
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