El "auténtico triunfador" granadino que cambió radicalmente de vida, en 'El Jefe infiltrado'

'El Jefe Infiltrado' visitaba la capital nazarí, en la que una empresa de limpieza y mantenimiento granadina, llamada 'Las Nieves', era la organización a evaluar, a través de su gerente adjunto, Alejandro González.

Para mantener intacta su coartada, éste se hizo pasar por un 'nini' (joven que no estudia ni trabaja) de 24 años que afrontaba el primer empleo de su vida, ante las cámaras de un programa ficticio de televisión llamado 'Borrón y cuenta nueva'.

Así pues, durante su infiltración, Alejandro tuvo que limpiar baños y oficinas junto a algunas de sus empleadas, pero también tuvo que experimentar cómo trabajan aquellos subordinados que tiene destinados al mantenimiento y la jardinería de comunidades y bloques de vecinos.

Uno de ellos se encontraba, precisamente, en Granada. Hasta allí se desplazó para evaluar a José (el jardinero sustituto) y Manuel (el jardinero titular). Lo sorprendente llegó cuando Manuel le contó su vida anterior al trabajo en 'Las Nieves' al que aún no sabía que era su jefe.

El jardinero titular reconoció ante las cámaras haber tenido un pasado con problemas con las drogas que le llevó a plantearse incluso mantenerse con vida. Sin embargo, la muerte de su hermano en un accidente de moto le animó a dejar todo eso atrás y dar un giro a su vida que le llevó a acabar trabajando para esta empresa y reformarse hasta ser un padre de familia.

No sólo eso. El protagonista de esta historia explicó cómo lleva veinte años rehabilitado y cómo se ha convertido, a los ojos de sus compañeros de trabajo y de los vecinos con los que trabaja, en "un auténtico triunfador de la vida, un ejemplo a seguir".