El rey Harald de Noruega, el vikingo invencible

Fue el pasado jueves cuando el monarca ingresó por la mañana en el hospital para someterse a una intervención con anestesia local, en la que se le reemplazó la válvula aórtica, que le había sido implantada en 2005. Fue la segunda vez en menos de dos semanas que el rey de Noruega acudía al Rikshospitalet. El 25 de septiembre, ingresó por dificultades respiratorias y permaneció tres días hospitalizado.

Fuentes oficiales confirmaron que se le había hecho la prueba del coronavirus y dio negativo, por lo que pudo recibir la visita de su mujer, la reina Sonia y su hijo.

A pesar de su delicada salud, Harald, de 83 años se niega a abdicar. Hasta que pueda retomar su agenda oficial, es su hijo, el príncipe heredero Haakon, quien ha asumido los deberes reales hasta en cuatro ocasiones este año. Dos veces por enfermedad y otras dos porque Harald se encontraba fuera de Noruega. Un papel para el que Haakonestá sobradamente preparado a sus 47 años y que empezó a desempeñar en 2003 cuando su padre superó un cáncer de vejiga y dos años más tarde para su primera operación cardíaca.

Los reyes noruegos Sonia y Harald llevan 52 años casados, y son uno de los matrimonios más sólidos de las monarquías europeas. Ella procede de una familia de clase media y era costurera, por lo que contó durante años con la oposición del padre de Harald, el rey Olav V, que no aceptó su matrimonio. Curiosamente Olav prefería a Doña Sofía, nuestra reina emérita, como pareja para su hijo. Pero a pesar de provocar numerosos encuentros, el emparejamiento forzado no prosperó.

Harald estaba enamorado de Sonia y juntos consiguieron superar todos los obstáculos, incluida la oposición del Gobierno de Noruega. En unas semanas verá la luz el libro 'El rey cuenta', cuyo autor es un famoso comentarista político noruego a quien el monarca, poco dado a conceder entrevistas, ha abierto su corazón y con el que ha mantenido once conversaciones en el palacio real. A través de sus páginas repasa sus 30 años de reinado, desde que empezó a servir a Noruega en 1957 con apenas 20 años hasta la actualidad, sin olvidar los duros momentos en los que tuvo que hacer frente a su familia para poder casarse con una plebeya, que le ha dado dos hijos y cinco nietos.