Los famosos también votan

«Son las 9 de la mañana y ya estamos aquí», se jactaban Pilar Rubio y su pareja, el futbolista merengue Sergio Ramos, -parapetados, eso sí, tras unas oscuras gafas de sol-, segundos antes de introducir sus sobres blancos y salmones en las respectivas urnas. Paciente en la cola, como el resto de ciudadanos, y con las papeletas en la mano, pillaron los fotógrafos a la actriz Olivia Molina. Entretanto, el centrocampista madrileño Mario Suárez alardeaba ante un móvil de lo que se disponía a hacer dentro de la cabina, con la cortinilla echada. El recién reincorporado multipresentador de televisión Jorge Javier Vázquez daba ejemplo en un centro catalán antes de hacer un llamamiento general a participar en las elecciones. Su colega Ramón García hacía lo propio en la mesa en la que su mujer, Patricia Cerezo, estaba de representante.

Hubo muchos más famosos que ayer se comportaron como ciudadanos rasos y se mezclaron con los demás para elegir presidente. Fue el caso de Ana Obregón y su hijo Álex, que hicieron apología del voto tras acudir juntos a ejercitarlo; la actriz Leticia Dolera, acompañada también de su madre para la ocasión; la intérprete María Esteve, quien apeló a la «responsabilidad» para mandar a «todo el mundo» a los colegios electorales; o Bibiana Fernández y Rossy de Palma, en un cinematográfico mano a mano. Solemnes o risueños, lo cierto es que votar les sienta muy bien.