Así es el modus operandi de la nueva estafa de los buzones con imanes
La táctica consiste en mezclar información cierta y falsa que se deposita a través de imanes para confundir a los ciudadanos
C. L.
Sábado, 14 de septiembre 2024, 10:04
Los buzones están siendo una nueva vía de entrada de los ladrones a las viviendas. Año a año las tácticas fraudulentas no paran de proliferar ... con el objetivo de alterar la tranquilidad de los ciudadanos en sus domicilios a través de estafas, que tienen que estar muy atentos a la bandeja de correo electrónico para evitar correos indeseados, pero últimamente también al buzón ordinario, en el que también están proliferando estafas de forma original para 'penetrar' y así burlar los métodos de estafa más tradicionales.
Las autoridades están obligadas a mantenerse alerta ante este tipo de prácticas, que están creciendo en algunas regiones de forma preocupante. Es el caso de la ciudad de Gard, al sur de Francia, en donde varios ayuntamientos han sido los encargados de dar la voz de alarma a sus vecinos para que no se vean sorprendidos por los 'malos'. Allí es donde se está llevando a cabo esta nueva estafa de los buzones con un modus operandi bastante particular y novedoso.
Los ciudadanos, a priori, lo ven todo normal cuando llegan a su domicilio y no encuentran ninguna anomalía cuando se disponen a entrar en su vivienda. Sin embargo, los 'cacos' ya han ingeniado previamente la forma de aprovecharse de la ingenuidad de los residentes, que no esperan que en el depósito de sus cartas pueda haber una 'sorpresa' desagradable para su bolsillo.
Esta estafa sobre la que las autoridades francesas están tratando de echar el cerco tiene como referente la bandera francesa, uno de los emblemas del país que reúne los colores azul, rojo y blanco. En el buzón se dejan imanes con los colores del estandarte del país y números de teléfono con los servicios públicos y de emergencias. Sin embargo, esos números de teléfono se mezclan con otros dígitos que, en realidad, no son de emergencias sino teléfonos fraudulentos que al ser marcados tienen un alto coste para la persona que realiza la llamada.
De esta forma, de una manera muy inocente, prácticamente sin ser consciente y aprovechándose de una necesidad, se realiza una llamada de teléfono que se convierte en una práctica abusiva sin que el usuario sea consciente de que realmente está cayendo en la trampa.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión