Platónica presenta su nueva colección de joyería artesanal con vistas a la Alhambra

Platónica concibe su particular carmen como un 'locus amoenus' clásico, un lugar natural idealizado, paradisíaco y tranquilo, que invita a la contemplación de la naturaleza y al disfrute de todos los sentidos. Un lugar apartado del ruido. Un Edén con vistas a la Alhambra. Esta conceptualización se materializa en cuatro capítulos de una historia, que dialogan entre sí conformando entre todos un universo completo: Cruz de mayo, El agua, Las flores y Un pajarito.

Las flores, el agua y un pajarito, los dos últimos materializados con dibujos inspirados en los motivos de la cerámica tradicional granadina, captan la esencia ambiental que configura un carmen. Las flores aportan color, fragancia y vida, transformando el espacio en un lugar lleno de encanto y serenidad. Representan la naturaleza en su máxima expresión y reflejan la tradición andaluza de llenar de color la vida. El agua aporta tranquilidad y movimiento. Juntos, las flores y el agua crean un ambiente armonioso y relajante, que invita a la contemplación y al disfrute de la belleza. Escuchar los trinos de los pájaros en un entorno tan hermoso como un carmen crea una sensación de paz y conexión con la naturaleza. Sin duda, los pájaros contribuyen a que estos jardines sean lugares mágicos que nos separan del bullicio de la ciudad y conforman esta atmósfera tan especial.

Por último, Cruz de Mayo, se presenta como un evento que acontece en el momento de máxima expresión de la belleza de los cármenes, como un ritual de advenimiento de la primavera.