La UE destaca «la rentabilidad y liquidez» de la banca española

Van en la línea de lo ya planteado en los diez informes previos aunque «quizá este es un poco más positivo» destacó Nadia Calviño, que participó este lunes y el martes lo hará también en las reuniones de ministros de Economía y Finanzas del Eurogrupo y Ecofin. España, pero sobre todo su banca, está obligada a permanecer bajo seguimiento de la UE hasta que se liquide más del 75% del capital prestado dentro del Mecanismo Europeo de Estabilidad (ESM, por sus siglas en ingleés) durante la crisis. Y, hoy por hoy, no hay preocupación sobre posibles incumplimientos.

«El coste medio de la deuda pública pendiente en mayo de 2019 fue de alrededor de 1.6 puntos más bajo que en 2011. Esto, combinado con la prolongación de la vida de la deuda pendiente, disminuye aún más los riesgos de pago», se subraya en el informe. España habría realizado hasta la fecha un total de nueve reembolsos anticipados voluntarios. El montante pendiente ascendería a 23.700 millones de euros, en torno al 57% del total.

El buen ritmo en la progresiva reestructuración bancaria y en el saneamiento de los balances captan la luz positiva de los supervisores , pero estos también se refieren a los asuntos pendientes.

Y en este punto hay dos referencias: el 'banco malo' y Bankia. «Los bancos han continuado vendiendo, principalmente activos domésticos. La empresa de gestión de activos Sareb volvió a registrar resultados negativos y está preparando una estrategia destinada a maximizar el valor en el proceso de desinversión, que tendrá que seguir siendo supervisada de cerca», se destaca. El mismo seguimiento que se requiere para el caso de la privatización de Bankia «y la posterior desinversión de fundaciones bancarias en cajas de ahorros» que, subraya el informe, serán claves para que se siga «reforzando el sector bancario español».