Monfils apaga a Andújar

Empapado por la tremenda humedad que asoló Nueva York, Andújar sucumbió ante un Monfils muy superior y centrado que no dio ninguna opción a lo largo de la hora y 28 minutos que se alargó el encuentro en la Louis Armstrong (6-1, 6-2 y 6-2).

Porque aunque el encuentro fue rápido para los intereses del español, Andújar disfrutó de lo que hoy parece un regalo y hace unos meses un imposible. Las repetidas lesiones en su codo le apartaron durante muchos meses de la competición y es que llegaba a este US Open sin ganar un partido de Grand Slam desde Wimbledon 2015.

Cuatro años después y varias operaciones de codo más tarde, Andújar se dio un homenaje en el torneo neoyorquino que solo Monfils, en un encuentro casi impoluto, pudo parar.

El francés terminó con 33 golpes ganadores y solo 22 errores no forzados mientras que Andújar celebró como clamando al cielo su tercer tiro ganador del encuentro, entrado ya el tercer set, con mucha desventaja en el marcador.

Su aventura se consumía, pero la ha disfrutado cada instante, aplaudiendo a su rival cuando se lo merecía, porque a principios de 2018 su ránking se perdía más allá del 1.690 del mundo y porque el codo amenazó con acabar con su carrera. Todo lo llegado después ha sido un regalo y una recompensa al duro esfuerzo y la perseverancia.

Pese a la derrota, Andújar volverá al top 50 el próximo lunes y se colocará el número 49 de la clasificación, su mejor posición desde agosto de 2015.

Por su parte, Monfils accede a cuartos de final del Abierto de los Estados Unidos por cuarta vez en su carrera, teniendo la posibilidad, ante el italiano Matteo Berrettini, de igualar su mejor resultado aquí, las semifinales en 2016.