Ignacio Fontes termina fundido en la final de 1.500
CAMPEONATO DE EUROPA ·
El mediofondista granadino sale con valentía pero se agota a falta de 500 metros para el final ante el bronce de Mario García Romo
Ignacio Fontes terminó fundido en la final de 1.500 metros del Campeonato de Europa de Múnich. El mediofondista granadino, que arriesgó mucho en la ... semifinal hasta conseguir el pase en la última recta, cambió de estrategia consciente de que no podía permitirse esa táctica si quería estar en la pelea por las medallas y lo terminó pagando. Salió valiente y en cabeza, junto al británico Neil Gourley, pero el noruego y posterior campeón continental Jakob Ingebrigtsen quiso mandar desde el principio e impuso un ritmo infernal para terminar venciendo con récord del campeonato de 3:32.76. Fontes acabó undécimo con 3:42.30, a nueve segundos de su mejor marca personal. Sí consiguió medalla de bronce Mario García Romo, con 3:34.88, emulando a Mohamed Katir en el Mundial.
Con un ligero retraso y el tartán mojado por la tormenta eléctrica que cayó en las horas previas sobre Múnich, Ignacio Fontes tomó la salida dispuesto a ser el español que se colase en un podio que irremediablemente iba a gobernar Jakob Ingebrigtsen, un mediofondista superior a cualquier otro del continente en este momento pese a que en el Mundial le arrebatase el oro el británico Jake Wightman, que esta vez no entraba en competición. No quería más sustos el noruego y se puso a mandar, haciendo que quienes se hubiesen propuesto seguirle elevasen el ritmo, entre ellos Mario García Romo. El español se pegó a su chepa y le funcionó, únicamente rebasado en la última recta por el británico Jake Heyward, con 3:34.44 por 44 centésimas.
Desmantelada su táctica desde el principio, Ignacio Fontes trató de continuar la carrera sin dejar de correr por dentro pero viendo cómo le iban pasando por fuera varios rivales hasta quedarse quinto. Siguió cediendo posiciones mientras se desfondaba, quizás pagando la falta de fondo por la anemia ferropénica que le afectó en las últimas semanas de preparación, hasta quedarse prácticamente clavado a falta de 500 metros. Incluso le rebasó el otro español en competición, Gonzalo García, séptimo y por tanto finalista con 3:37.40, ahí por donde debía estar el granadino que únicamente consiguió superar finalmente, undécimo, al belga Ismael Debjani.
«No sé qué le pudo pasar, aun estando bajo de hierro, porque demostró que no estaba mal. Quizás fue la tensión de querer ir a por todas en cabeza, a por la medalla. En cuanto dieron el cambio de ritmo y él se quedó atrasado le empecé a ver falto de reactividad en el suelo y a falta de dos vueltas sabía que no iba con la chispa que debía tener. Terminó sobreviviendo prácticamente y era muy difícil responder a una carrera tan lanzada ya. No salió bien», comparte triste con IDEAL su entrenador Jesús Montiel, quien también apreció «algún gesto raro» durante la carrera. Con todo, mantiene el orgullo por ver a su pupilo de nuevo finalista, esta vez de Europa, tras haberlo sido anteriormente olímpico y del mundo.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
