La granadina Laura Bueno se queda fuera de la final del relevo mixto con polémica

Las descalificaciones provisionales de Estados Unidos y República Dominicana fueron justificadas por la vulneración de los artículos 24.19 y 24.20, respectivamente. La de los 'yankees' se corresponde con el hecho de que un relevista no puede empezar a correr antes de la zona de entrega del testigo, una particularidad del 4x400 con respecto al 4x100, y uno de sus atletas inició el desplazamiento más de un metro antes, por lo que se descalificó al equipo. La eliminación dominicana, por su parte, se ampara en que uno de sus atletas recibió el testigo en una calle distinta a la asignada por el juez de carrera en función del paso del relevista anterior por el corte de los 200 metros. En ambos casos existen imágenes que amparan a los jueces, por lo que la polémica está servida ante la definitiva recalificación de ambos equipos.

Tanto Estados Unidos como República Dominicana presentaron sendas alegaciones que fueron atendidas por el comité de apelación. De acuerdo a los comunicados oficiales de los jueces, estos entienden que en el caso de Estados Unidos «no se colocó correctamente al atleta cuando se le dio la señal» mientras que en el de la República Dominicana se dio una circunstancia similar con el añadido de que «no interfirió ni produjo consecuencias adversas a ningún otro equipo».

Iba a ser la primera ocasión en la historia en la que un relevo español se clasificase para una final de Juegos Olímpicos. Tuvo un papel muy protagonista en la gesta la granadina Laura Bueno, no tanto por haber entregado el testigo en una buena posición sino por haber sobrevivido en su carrera. La velocista fue la segunda posta tras Samuel García, ambos capitanes del equipo. Recibió en tercera posición y aunque tuvo algún problema para agarrar el testigo consiguió retener la cuarta posición y peleó por mantenerla, pero no tardó en encontrarse con unos tremendos bloqueos saldados a golpes que a punto estuvieron de llevarle al suelo. Le dieron hasta en el carné. Llegó a ocupar el último lugar de la velocísima carrera, pero su gran mérito fue aguantar en pie.

La granadina peleó hasta el final por la mejor posición posible y de hecho intentó varios ataques por fuera, hasta los últimos metros, entregando casi que a la par de sus rivales. Aauri Lorena Bokesa y Bernat Erta se encargaron de cerrar el relevo en la penúltima posición, solo sobre Nigeria por 31 centésimas. Las descalificaciones provisionales de Estados Unidos y República Dominicana premiaron con un puesto en la final el esfuerzo valiosísimo de cada uno, sobre todo el de Laura Bueno para no caerse, pero todo se fue al traste en los despachos cinco horas después.

Laura Bueno y el equipo español volverán de Tokio con un enfado y una decepción enormes, sin diploma olímpico finalmente, pero sí con una plusmarca nacional y una décima posición definitiva entre ambas semifinales. Además del sueño de alcanzar la final, la expedición se había marcado el reto de concluir entre los doce mejores.