María Pérez se queda con la miel en los labios, a ocho segundos del bronce

La marchadora granadina planteó una carrera muy táctica e inteligente en la que, siempre desde segunda fila, trató de responder a todos los cambios de ritmo que se dieron de sus rivales para nunca despegarse y mantener las opciones de medalla hasta el final. Ese era el objetivo, sobrevivir hasta el último kilómetro, y lo consiguió pese a los más de 30 grados y 60% de humedad que había en Sapporo, donde se celebró la prueba. Siempre estuvo bien colocada, en la cabeza de la carrera. Sin embargo, el imponente estado de forma de la italiana Antonella Palmisano, la última campeona de Europa, fue imposible de seguir por ninguna de sus contrincantes. Ni siquiera por las favoritas chinas.

Palmisano se hizo con el oro olímpico gracias a un tiempo final de una hora, 29 minutos y 12 segundos. Le siguieron la colombiana Sandra Arenas, a 25 segundos, y la china Hong Liu, a 45. María Pérez, cuarta con la miel en los labios, se quedó a ocho segundos del bronce con 1:30:05 y a 53 de Palmisano. De las otras dos españolas, Raquel González fue 14ª con 1:31:57 y Laura García-Caro 34ª con 1:37:48 después de sufrir una penalización de dos minutos al ver tres tarjetas rojas. La de Orce tuvo un margen de 28 segundos sobre la mexicana Alegna González, que fue quinta. La china Shijie Qieyang, una de las candidatas a medalla, acabó séptima con 1:31:04 mientras que su compatriota Jiayu Yang fue duodécima con 1:31:54 tras su penalización de dos minutos.

María Pérez llegó a marchar primera durante unos segundos en el decimocuarto kilómetro tras un punto de avituallamiento, pero las chinas Yang, Qieyang y Liu se abalanzaron rápidamente sobre ella sin consentir su atrevimiento. Tampoco a la de Orce le interesaba liderar la prueba. Aguantó su último ataque para el final, pero Palmisano estiró la prueba a falta de tres kilómetros con un ritmo imposible de asumir para el resto. Qieyang quedó atrás y Yang acabó con tres tarjetas rojas en el 'pit lane'. María Pérez entendió que debía ser cauta porque ella, al contrario que las demás, no acumulaba amonestaciones.

Fue en el último kilómetro cuando se produjo la penalización de la brasileña Érica de Sena, que iba tercera. María Pérez ascendió entonces hasta la cuarta posición, codo con codo con Hong Liu, con el bronce a tiro. La china se adjudicó en este mismo 2021 el récord del mundo en 1:24:27, una marchadora que ha corrido este mismo año los 20 kilómetros en dos minutos menos que la de Orce cuando fue campeona de Europa en Berlín con su mejor marca personal. La granadina no se achantó e intentó el ataque, con cierta alternancia por momentos mientras doblaban a otras marchadoras, pero finalmente se impuso Liu por una distancia de ocho segundos que alejaron a María Pérez del bronce. Un desenlace cruel que no empaña una actuación fantástica.