«Puto negro» o «mena de mierda», insultos racistas sufridos por Lamine Yamal en el Bernabéu

«¡Puto negro!», «¡Puto moro!», «¡Vete al semáforo a vender pañuelos!», «¡Mena de mierda!»... Estos son algunos de los graves y lamentables insultos racistas que sufrió Lamine Yamal en el coliseo del vigente campeón de Liga y de Europa. Un grupo reducido de aficionados del equipo blanco la tomaron con el joven extremo de 17 años después de que marcase el tercer gol de su equipo, el primero que hacía en su corta carrera en el feudo del eterno rival.

Una simpre celebración bastó para que la afición presente en uno de los córners profiriese todo tipo descalificaciones, incluidos grave insultos racistas también dirigidos contra el brasileño Raphinha. Tras macar, Lamine se fue a la banda y rápidamente apareció Raphinha para abrazarse con él. «¡Tu puta madre!»,se escucha en uno de los vídeos. «¡Hijo de puta, eres un mena de mierda, eso es lo que eres». «Puto moro» y «puto negro!» dice otro energúmenos, al que un vídeo capta perfectamente.

Poco después, Raphinha y Lamine se acercaron hacia esa zona para ejectuar un saque de esquina y los insultos prosiguen. «Vete al semáforo a vender pañuelos, a vender pañuelos», le dicen desde la grada mientras los jugadores del Barça evitan gestos de respuesta a la grada. Se da la circunstancia de que en los últimos tiempos han tenido lugar varios casos de racismo en España, con el madridista Vinicius normalmente como víctima y la exigencia de respuestas contundentes por parte de las instituciones y en especial del Real Madrid.

Lo sucedido en el Bernabéu no trascendió hasta este domingo, motivo quizá por el que el club presidido por Florentino Pérez no reaccionó tras el choque sino que lo hizo al día siguiente. El Real Madrid asegura que ya ha abierto una investigación para localizar a los autores de estos insultos para sancionarlos y llevarlos ante la justicia. Además, condena de manera rotunda cualquier tipo de comportamiento que implique racismo, xenofobia o violencia en el fútbol y en el deporte y lamenta profundamente los insultos que unos pocos aficionados profirieron anoche en uno de los córners del estadio.

También LaLiga ha salido a la palestra para, como es habitual, «condenar enérgicamente los hechos» y anunciar que los denunciará. «Ante los hechos ocurridos durante el transcurso del partido Real Madrid-Barcelona, en el que se observaron intolerables conductas racistas, LaLiga denunciará de forma inmediata los insultos y gestos racistas recibidos por los jugadores azulgranas ante la Sección de Odio de la Brigada de Información de la Policía Nacional». El organismo que preside Javier Tebas informará también a la Fiscalía y asegura que «continúa firme en el compromiso de erradicar cualquier tipo de conducta racista y odio dentro y fuera de los estadios. En el deporte no hay lugar para esta lacra», concluye.

Una condena a la que se adhiere el Consejo Superior de Deportes. El máximo organismo del deporte español considera «inadmisibles estos comportamientos, que están alejados de los valores de convivencia y respeto inherentes al deporte, y para cuya erradicación es imprescindible el trabajo de todos y, en especial, la colaboración de los clubes». Y garantiza que estos incidentes serán analizados por la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte.

No se quedó atrás en la denuncia la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, quien ha advertido que que el Gobierno luchará contra los insultos racistas dirigidos a Lamine Yamal en el Bernabéu y ha aseverado que el Ejecutivo no va a permitir que en el deporte se normalicen este tipo de agresiones. «Los insultos racistas dirigidos a Lamine Yamal en el clásico son todo contra lo que vamos a luchar desde el Gobierno», dijo Saiz en un mensaje publicado en la red social X. La ministra aprovechó ese mismo mensaje para trasladar el «total apoyo» a los jugadores y a la denuncia de LaLiga.

«Todo mi apoyo a Lamine, Ansu y Raphinha», señaló por su parte en redes sociales Vinicius, que pide una sanción para los culpables y recuerda que «no hay espacio» en la sociedad para quienes profieren insultos racistas.

Falta por conocer aún si el Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol analizará y sancionará los hechos, como ha hecho en otros casos en los que estuvieron involucrados ultras valencianistas en Mestalla y colchoneros en el Metropolitano, para proponer el cierre de una parte de la grada del coliseo blanco.