Lino y Griezmann impulsan al Atlético en el duelo trampa del Metropolitano

Samu Lino marcó en el primer acto, pero cierta relajación de los madrileños en la segunda mitad permitió crecer a los isleños y merodear incluso el empate. Al final, se festejó en el Metropolitano el partido número 500 del Cholo en Liga y se recordó con inmenso cariño a Luis Aragonés en el undécimo aniversario de su fallecimiento. La peor noticia en clave local, la amarilla mostrada a Le Normand, que causará baja en el derbi capital del próximo sábado en el Santiago Bernabéu entre el primero y el segundo de la tabla.

Innegociable el axioma del partido a partido, Simeone se dejó de concesiones de inicio ante un Mallorca en horas bajas y puso en liza al citado Le Normand, Koke y, sobre todo, Julián Álvarez, los tres apercibidos de sanción. Ante las bajas de De Paul, sancionado, y Galán, lesionado, Reinildo ejerció de lateral o tercer central, dependiendo de si tocaba atacar o defender en bloque bajo, y Koke junto a Barrios en una sala de máquinas orgullo de la Academia colchonera. Descanso para Griezmann hasta la media hora final y primera titularidad para Sorloth tras superar su lesión.

Enfrente, Jagoba Arrasate buscó cambiar una dinámica pésima apostando por una línea de cinco atrás y Larin y Muriqi arriba para pelear balones largos, conseguir alguna falta y tratar de sorprender en segundas jugadas. Los bermellones, esta vez de amarillo fosforito, comenzaron bien, incluso dominantes aunque sin generar peligro. No hacían prisioneros en las disputas los baleares, dispuestos a sacar tajada del Metropolitano o a vender muy cara la derrota, pero de forma paulatina el Atlético fue imponiendo su ley.

La primera gran ocasión madrileña la fabricaron la Araña, que se alejó del área para ejercer más de Griezmann, y Sorloth. El argentino vio un gran movimiento del noruego, que se hizo hueco ante Raíllo, pero su tiro lo abortó Greif. A la segunda, el Atlético no falló. Le Normand, fantástico en las vigilancias y la anticipación, le comió la tostada a Muriqi, Giuliano percutió, Sorloth se llevó al defensa y Samu Lino definió con la zurda, raso y cruzado. Desde ahí hasta el descanso, claro dominio rojiblanco ante un Mallorca incapaz de dar tres pases seguidos. Solo Darder domaba el balón y Mateu Morey, interesante lateral procedente del Dortmund, generaba en sus arrancadas cierta confusión en los colchoneros.

A la vuelta del vestuario, el Atlético comenzó a pensar en lo que se avecina. Lógico en parte, pero un serio riesgo con una ventaja tan corta. A falta de media hora, doble cambio de manual del Cholo para proteger a Julián y dar resuello a Giuliano. Pudieron sentenciar los colchoneros, pero Larin, valiente, salvo un disparo de Barrios con marchamo de gol y Griezmann no llegó por centímetros a embocar un pase de Le Normand en funciones de delantero.

Como el partido seguía vivo, el Mallorca comenzó a creerse que puntuar era posible. Darder dibujó un centro que golpeó en la parte superior del travesaño, luego hizo lucirse a Oblak en una falta lateral y también el recién entrado Asano no empató porque Reinildo estuvo inmenso. Le Normand vio la temida amarilla y a continuación el Cholo retiró a Koke. Tampoco cerró la riña Riquelme, que estrelló un golpe franco en el larguero. Se jugaba al filo en el descuento, hasta que una sutileza de Griezmann, acabó con la incertidumbre.