LaLiga recurre la cautelar del CSD al Barça por el 'caso Olmo'

El goteo de quejas oficiales por parte de los clubes, primero el Athletic, luego Las Palmas, el Atlético de Madrid, el Espanyol, el Valencia o el Málaga ha conducido al organismo presidido por Javier Tebas a este recurso para tratar de preservar lo que considera el orden económico establecido en el fútbol español, fijado por sus normativas y las de la FEF.

Por ahora, y a la espera del pronunciamiento de la justicia ordinaria, que en su día ya denegó al Barça la reinscripción de los dos jugadores a través de dos juzgados distintos, Dani Olmo y Pau Víctor cuentan con licencia y pueden jugar, para empezar en la final de la Supercopa de España del próximo domingo, con el morbo de tratarse de un duelo ante el eterno rival, un Real Madrid que a diferencia de otros clubes españoles, ha evitado manifestar públicamente su postura respecto al 'caso Olmo'.

Más allá de los tribunales, el revuelo por la cautelar del CSD llegó el miércoles a Arabia Saudí, con el polémico comportamiento de Joan Laporta, presidente del Barça, que celebró la medida con un corte de manga e insultos dirigidos a dirigentes federativos en el King Abdullah Sports City, estadio en el que se celebran los partidos de la Supercopa de España.

Con la tensión por las nubes después de la escandalosa actuación del mandatario azulgrana, que podría derivar en un expediente federativo, este sábado está prevista en Yeda una cena entre los presidentes de los dos finalistas, Real Madrid y Barça, con Florentino Pérez y el propio Laporta, junto a varios representantes de la FEF.

Tal es la dimensión del 'caso Olmo', un asunto político desde que se pronunció un órgano del Gobierno como el CSD, que incluso su alcance llegó al Congreso y el Senado, con las preguntas registradas por los grupos parlamentarios del PP en contra de lo que califican como una «decisión inédita al admitir una medida cautelarísima incumpliendo las más elementales reglas de 'fair play'».