Modric y Koke se unen a la Policía para pedir un derbi sin violencia

«Somos rivales, no enemigos», dice el capitán del Real Madrid, que le cede la pelota a su colega del Atlético. «No confundas pasión con violencia», sostiene el rojiblanco. «Disfruta del partido y respeta», se encarga de recodar la Policía, que velará por la seguridad en un encuentro declarado de alto riesgo y al que asistirán 3.800 aficionados del Atlético de Madrid, lo que equivale a un 5% del aforo según determina la UEFA para las aficiones visitantes. Para la vuelta, el desplazamiento de aficionados madridistas al Metropolitano será de unos 2.800 seguidores.

Tal y como informó el martes la Delegación del Gobierno, más de 1.900 profesionales conformarán el dispositivo de seguridad del derbi, incluyendo la Unidad de Intervención Policial, la Unidad Especial de Caballería y la Brigada Provincial de Información. Además, estarán involucrados efectivos de la Policía Municipal de Madrid, Agentes de Movilidad del Ayuntamiento, así como profesionales del SAMUR-Protección Civil, el Cuerpo de Bomberos y Cruz Roja. El club blanco también aportará su propio equipo de seguridad privada.

Modric y Koke, quizá los jugadores más emblemáticos de ambas plantillas, ponen un punto de cordura en un momento en el que existe inquietud por el comportamiento de los hinchas de ambos equipos. A la tradicional rivalidad entre ambos equipos capitalinos se añade el hecho de que este curso ya se han enfrentado dos veces, a las quejas oficiales del club madridista por los arbitrajes en la Liga y a la ironía con la que les respondieron desde el lado colchonero a través de las redes sociales.