Inexplicable y polémico batacazo del Atlético ante un Lille menor

Un éxito sonado que deja a los colchoneros contra las cuerdas y que nadie podía imaginarse viendo el discurrir de la riña. Y es que el equipo del Cholo marcó pronto por obra de Julián Álvarez, tras un presente de Touré, y pudo sentenciar en el primer acto. Pero Sorloth, una vez más, no tuvo su día y perdonó la vida a los galos. Y en la segunda mitad, cuando los madrileños controlaban pero sin definir, pagaron su falta de contundencia en las áreas. Un disparo enorme del kosovar Zhegrova que golpeó en Giménez, un penalti ridículo señalado por el italiano Guida y otro postrero tanto de rebote, sellaron la primera derrrota de los colchoneros en el Metropolitano europeo desde que el Milan salió victorioso. Doblete del canadiense Jonathan David, el mismo que ajustició a la escuadra de Ancelotti.

El Atlético debió de irse al descanso con el pleito más que resuelto porque fue muy superior a un rival inexperto y dispuso de tres ocasiones pintiparadas para ampliar la renta que marró Sorloth. El gigante noruego pareció ver la luz con su reciente doblete ante el Leganés y es verdad que genera mucho, pero esta vez falló tres goles clamorosos. En dos mano a mano, intentó superar a Chevalier con sendas picaditas, pero primero el balón terminó saliendo por la banda y más tarde el portero galo paró sin dificultades porque no se fue al suelo.

El Atlético abrió el camino enseguida, fruto de un error pueril del joven Ousmane Touré. Encimado por Griezmann, el central maliense intentó ceder a Chevalier, pero asistió a Julián Álvarez, que al primer toque se estrenó como goleador colchonero en esta Champions. Nada que ver la manera de definir de la Araña, todo precisión, con el vigente pero ofuscado pichichi.

Con cuatro cambios respecto al equipo que comenzó ante los pepineros, un once más reconocible y el tridente Julián-Griezmann-Sorloth en escena por segunda vez este curso tras su aparición como titulares ante el Real Madrid, el Atlético se mostraba muy superior al Lille. El timorato equipo francés no se parecía en nada al equipo que sometió al Real Madrid hace tres semanas. Sufría bajas y, además, el técnico Bruno Genesio dejó jugadores clave en el banquillo.

Inexplicable

La noche parecía tranquila porque los colchoneros manejaban con relativa calma y el Lille ni se acercaba. Pero cuando un duelo no se cierra, y más en Champions, siempre existe riesgo. Y tanto que existe. De pronto, en una acción aislada, Zhegrova probó fortuna y el lanzamiento del alemán nacionalizado kosovar entró tras desviar con la testa Giménez.

Entró Correa, el agitador, en lugar de Sorloth, aplaudido pese a sus errores ante el gol, y la tuvo Griezmann antes de la polémica. Resulta que el trencilla italiano indicó penalti en una acción de Koke que no pareció nada, más bien mano previa de un francés, y David no perdonó. Increíble, pero cierto. Intentó el Atlético la heroica, las tuvieron Lino y Giuliano, pero fue Jonathan David el que sentenció. Inexplicable.