Un zarpazo de tronío de un líder que no es casual

Sin duda, un gran ejemplo de ello era el encuentro que el Covirán Granada jugaba el martes en Fontajau, la guarida de un Bàsquet Girona en plena forma donde las huestes de Marc Gasol amenazaban con quebrar el gran momento de forma de los rojinegros.

Por dificultad, dado el nivel del rival –diez victorias y tres derrotas desde la llegada de Gasol, enlazando además siete éxitos consecutivos antes del partido con el Covirán–, por ubicación, al jugarse en martes entre dos duelos también complicados frente a Palencia y Oviedo, y por el momento del mismo, al llegar justo tras encaramarse los de Pin por primera vez en la temporada al liderato en solitario, el duelo en Girona era, sin duda, de esos subrayados como relevantes.

Dominio

Y lo cierto es que la respuesta del Covirán no pudo ser mejor, especialmente en una segunda mitad en la que los rojinegros dominaron el partido con puño de hierro, castigando al cuadro local cada vez que Marc Gasol tomaba aliento en el banquillo para terminar ganando con holgura en una de las canchas más complicada de la LEBOro y ratificando que la situación de líder en solitario no es, en absoluto, fruto de la casualidad.

El equipo de Pin fue capaz de superar el alto nivel físico con el que suele jugar el cuadro gerundense y, cuando su nivel de acierto ante el aro catalán se elevó en la segunda mitad, voló hacia una victoria que supone un sonoro golpe sobre la mesa de la LEBOro, demostrando ser capaz también de soportar la presión del liderato en la categoría.

Cabe reseñar el esfuerzo hecho por la directiva presidida por Óscar Fernández-Arenas ante el desplazamiento a tierras catalanas. Habida cuenta de que se trataba de un duelo entre semana, el club eligió viajar hasta Barcelona en avión el lunes, desplazándose posteriormente en autobús hasta Girona, donde descansó el equipo en la noche previa al partido. Un asunto que puede resultar baladí pero que no lo es en absoluto. No es difícil entender lo pesadas que hubieran estado las piernas de los rojinegros en caso de haber viajado hasta Girona en bus para jugar un martes ante un rival de nivel tras haber disputado otro encuentro el sábado.

De ahí que sea de aplaudir la ambiciosa decisión del club, minucioso con la economía y poco dado a usar el transporte aéreo más que en las salidas en que es imperativo, como Melilla o Palma de Mallorca. El equipo, eso sí, regresó a Granada en autobús, pero agradeció un movimiento acorde al alto nivel del Covirán y que quien sabe si podrá ser decisivo en la encarnizada lucha por el ascenso a la Liga Endesa.

Crucial marzo

De esa forma, el Covirán sigue rayando a gran altura en un mes de marzo que se antojaba como clave para saber si los de Pin saldrán del mismo como serios candidatos al ascenso directo. Por el momento, ya han mordido el polvo ante los rojinegros Huesca, Palencia y Girona. Quedan por delante tres encuentros más: Oviedo (sábado a las 18.30 h en el Palacio), la difícil salida a Lleida –el otro rival directo por la vía más rápida al ascenso junto al Estudiantes– y Melilla en casa, el martes 29. Luego llegará el doble duelo en Madrid ante Estudiantes, primero en Copa (3 de abril) y, siete días después, el de Liga. Eso sí, quien marca ahora mismo el ritmo de la Liga es el Covirán. El líder no parece casual.