El trabajo en la sombra de Edgar Vicedo

Otra buena muestra está siendo el finlandés Elias Valtonen, que está rindiendo en Granada al mejor nivel de su carrera, sabiendo aprovechar un papel más relevante del que nunca ha tenido en ningún otro equipo de los que ha estado en su carrera profesional. Convertido en uno de los héroes de la pasada permanencia, con aquel inolvidable tapón sobre el argentino Nico Brussino, el nórdico es uno de los valores más regulares del Covirán, pues apenas comete errores y tiene además una alta fiabilidad cuando se trata de mirar al aro contrario: firma por el momento un 57% en tiros de dos (20/35) y un 50% desde la linea de tres (15/30), porcentajes altísimos para un jugador exterior.

Solidez

Lejos de la realidad de otros jugadores como Scott Bamforth o Gian Clavell, con mayores dientes de sierra en su rendimiento en lo que va de curso, Valtonen está cuajando un rendimiento enormemente regular y de gran utilidad para el Covirán. El de Eura firmó ante el Joventut su máxima anotación del curso (17 puntos), pero ya había venido siendo uno de los valores rojinegros más consistentes en sus ocho actuaciones previas –no jugó en el estreno en el Palau Blaugrana por unas pequeñas molestias físicas–.

Con menos brillo que el finés –pues actúa desde un papel más secundario y con menos minutos para Pablo Pin–, un perfil similar en las huestes del técnico granadino es el que ejerce el madrileño Edgar Vicedo, que está siendo una de las piezas importantes en la 'segunda unidad' rojinegra, dentro también de una línea bastante regular en la que es su primera campaña en Granada, adonde llegó procedente de Tenerife, haciendo el camino a la inversa que en verano adoptaron Lluís Costa y David Kramer.

El canterano del Estudiantes e internacional español está demostrando que, con su fichaje, el Covirán, como por la mayoría esta temporada, apostó por la experiencia en la Liga Endesa, en la que Vicedo cuenta ya con trece temporadas en su mochila. Acepta su papel y está siendo especialmente relevante en una faceta, la del rebote, en la que es el tercer rojinegro con más capturas totales (3'6 por encuentro), dato al que se le saca mucho más lustre cuando se contextualiza con los poco más de 17 minutos que Vicedo promedia. Solo Amine Noua (5'1) y Jacob Wiley (3'8) firman más rebotes por encuentro que el madrileño, pero si se extrapola el número de capturas a los minutos sobre la cancha, el valor es prácticamente el mismo en los tres casos (0.2).

En ese sentido, el polivalente jugador del Covirán, con más experiencia como '3' en su carrera, pero recientemente más como '4', puede estar muy satisfecho de un trabajo en el que también sus ayudas defensivas son muy valoradas por el cuerpo técnico. Lo único que atormenta un poco de momento a Vicedo es su acierto en su teórica especialidad, el triple (29'6%). El madrileño trabaja con denuedo para subir esa efectividad a niveles más habituales en su carrera. Si lo logra y sigue reboteando igual, su fichaje estará más que amortizado.