La receta del sueño para subir a la ACB

Por supuesto, en la alta competición todo el mundo entrena. Pero no todos se cuidan igual. Los hay que viven de un talento innato, pero su interés de pasar al siguiente nivel no es tan elevado. Y existen también los que miran con lupa cada posible mejora para añadirla a sus posibilidades y dar un paso más. Es el caso de Germán Martínez, la última joya de la cantera granadina capaz de alcanzar el profesionalismo. Estudiante de la facultad de Ciencias del Deporte, el nuevo jugador del Zunder Palencia –se marchará cedido allí esta temporada, volviendo en la siguiente al Covirán– es un tipo metódico y esforzado como pocos.

Eso es lo que le llevó hace algo más de un año a seguir en Instagram al asesor del sueño Gregorio Mora. «Siempre había tenido inquietud por el tema, ya que es un pilar del entrenamiento. Hay una frase que me gusta mucho:«el entrenamiento cansa y el descanso entrena», que es muy cierta. Leía mucho sobre ello pero tenía una nebulosa de ideas en la cabeza», cuenta.

Mora, desde Granada, es una especie de pionero global –«hay muy pocas personas en el mundo que se dediquen a mejorar el sueño de forma natural», defiende– en la readaptación del descanso. «Empecé por inquietud y necesidad, pues mi madre tenía un problema y la medicina no llegaba a nada más que acabar en la farmacia», arranca, reivindicando que no debe «ser así pues dormir es una función natural».

El terapeuta asegura haber «conseguido desarrollar un método que funciona de verdad» y entiende que la clave «está en reeducar» los hábitos para zanjar un problema global. Subraya que el 80% de la población «no duerme bien». Para su trabajo, es clave conocer el cronotipo –lo logra a través de una encuesta estandarizada– de sus clientes, para posteriormente adaptar sus recomendaciones a la fisiología y necesidades de cada uno. «Saber el cronotipo, que es algo heredado de tus padres, es tan importante como el grupo sanguíneo. Si eres matutino no te puedes acostar a las dos de la mañana, o si eres deportista no vas a rendir igual jugando por la mañana que por la tarde», cuenta.

Por su parte, Martínez asegura que, tras estos meses de trabajo, su mejora es evidente. «Cuando acababa de entrenar era un zombi y ahora me encuentro mucho mejor», ratifica uno de los héroes del ascenso del Covirán, autor de aquellos cinco inolvidables triples en la primera parte ante el Almansa.

La tercera pata de esta relación es Jesús Rodríguez, director general de 'Sleep Study Health' y socio de Mora. «Arrancamos con la idea de tratar a deportistas de élite, para mejorar su rendimiento y prevenir lesiones, aunque ahora mismo no suponen más del 10% de la facturación», cuenta. El directivo explica que uno de sus primeros objetivos fue trabajar a nivel global con el Covirán, pero que no alcanzaron un acuerdo y por ello comenzaron a modo particular con Germán. Quizá las reticencias iniciales son lógicas –«no hace tanto, en este país nadie hablaba de un nutricionista o un entrenador personal», recuerda– pero los resultados están ahí. «Hay estudios en la NBA que confirman que los jugadores que duermen peor tienen peores porcentajes de tiro y mucho más riesgo de lesión», aporta el inquieto Martínez.

En cuanto al caso concreto del canterano rojinegro, Gregorio Mora asegura que aunque se «cuida mucho y entrena muy bien, necesitaba estructurar mejor el sueño». Por su parte, el jugador admite que lo que más le costó fue «la transición para irme a la cama». Desvela que hora y media antes «tu cuerpo debe ir aterrizando poco a poco», lo que se consigue a través de «dejar las pantallas, bajar las luces, hacer estiramientos...». Para ello, especialmente en los viajes, necesitó cierta ayuda de su compañero de habitación –'Petit' Niang–. «Al principio le chocó un poco, pero siempre lo ha respetado», narra. Martínez cuenta que el pívot «solía hablar con sus amigos de Senegal y cuando yo arrancaba la rutina él empezaba a hacerlo por 'whatsapp' porque sabía que tenía que ir bajando el ritmo». Con 24 años recién cumplidos el base granadino asegura entre risas que los consejos de Mora le han servido «hasta para dormir en el autobús tras los partidos, lo cual aseguro que no es nada fácil».

El asesor del sueño cuenta cómo, a través de su método, ha «participado en varias investigaciones científicas» en las que «los propios científicos no se creían los resultados». Por ejemplo, asegura que solo con mejorar el sueño de una persona «se puede reducir su oxidación celular a la mitad», y defiende que solo hay «tres enfermedades conocidas que impidan dormir, por lo que no está justificado no hacerlo o depender de fármacos».

La propuesta de Mora no es, en principio, difícil de conseguir. «El 70% de cosas son muy normales, lo que él te dice es cómo y cuándo tienes que hacerlo desde que te levantas», aporta Jesús Rodríguez, que aclara que al mes «ya se ven los resultados y en cuatro o cinco meses el cambio es completo y el tratamiento termina».

A Martínez, desde luego, no le ha ido mal. Y no solo en la cancha. «Tenía muchas pesadillas, no relacionadas con el deporte, e incluso he mejorado eso». Miel sobre hojuelas y dulces sueños.