El Covirán enlaza por primera vez tres victorias en la Liga Endesa... sin estar viviendo al límite

Eso sí, en este caso los de Pablo Pin fueron capaces de superar a un enemigo al que nadie espera en la zona baja de la clasificación en la recta final del curso, y que además llegaba al Palacio de los Deportes en un magnífico momento de forma, justo tras superar al Real Madrid y habiendo vencido en cuatro de sus cinco últimos envites. Los rojinegros lograron así romper al fin con un cierto techo de cristal que esta temporada solo les había permitido vencer a equipos llamados a pelear por la supervivencia en la categoría. Ahora, por primera vez, lograron deshacerse de un rival de la zona noble liguera, confirmando así las buenas sensaciones dejadas sobre todo en los últimos minutos frente al Leyma y también durante todo el encuentro en la visita a Lugo.

El Covirán ha logrado así poner algo de tierra de por medio con la zona de descenso y mejorar notoriamente su situación, ya que al término de la séptima jornada liguera era colista y ahora ocupa la decimosegunda plaza, con dos victorias más que el colista –Bàsquet Girona, al que además ganó a domicilio por 52-82– y una más que el penúltimo, un Río Breogán al que los de Pin también batieron por amplio margen (74-92) como visitantes. Desde luego, un panorama radicalmente diferente al existente mediado el mes de noviembre, cuando los granadinos enlazaban cuatro derrotas, siendo especialmente dolorosas las sufridas en Andorra (87-71) y aún más ante el Surne Bilbao en el Zaidín (72-84).

En racha

Es más, ateniéndose simplemente a los resultados, no es desmesurado afirmar que el Covirán pasa actualmente por uno de sus mejores momentos de forma de siempre desde que forma parte de ese selecto club que es la ACB. Los tres partidos ganados de forma consecutiva por los de Pablo Pin suponen la primera vez que el club lo consigue desde que está en la élite sin estar en una situación de máxima agonía.

De hecho, solo existe un precedente, que son los tres últimos duelos de la campaña 2022/23, la primera del Covirán en la Liga Endesa, en la que los de Pin derrotaron a Casademont Zaragoza (71-68), Betis (85-91) y Joventut Badalona (73-62) para firmar una permanencia que, al descanso del duelo frente a los maños en la jornada 32, prácticamente se consideraba una quimera en el Palacio de los Deportes. Desde entonces, el club rojinegro no había vuelto a tener tan positiva dinámica hasta ahora, pues en ningún momento del curso pasado logró engarzar tres victorias de forma consecutiva.

Las mejores rachas de ese Covirán 2023/24 fueron de dos triunfos y se dieron en dos ocasiones. La primera, en las jornadas 9 (91-88 ante el Morabanc Andorra) y 10 (77-94 en la cancha del Monbus Obradoiro). La segunda, también con máxima urgencias, de nuevo en el epílogo del ejercicio: 77-84 en Zaragoza y 74-67 ante el Gran Canaria en las dos últimas fechas, rubricando de nuevo otra salvación viviendo casi en la mayor agonía imaginable. Anteriormente, el Covirán debutante en ACB también ganó dos partidos en las jornadas 3 (82-89 en Murcia) y 4 (98-84 ante el Surne Bilbao).

Estos datos demuestran que los días de vino y rosas, de alegrías consecutivas para la parroquia rojinegra, no son ni mucho menos el entorno habitual, por lo que la afición del Covirán bien hará en paladear este momento, el primero en el que su equipo, sin estar contra las cuerdas y apenas sin margen de error, se permite el lujo de ganar tres partidos seguidos en la mejor liga doméstica de Europa. Bien es cierto que los de Pin arrancaron esta serie en el farolillo rojo, pero con mucho más margen del error del existente en aquellos dos duelos frente al Casademont Zaragoza. De ahí que se pueda asegurar sin ningún reparo que el equipo granadino vive uno de sus momentos más dulces en la élite.

Ahora, el reto para los de Pin es, claro, conseguir la cuarta victoria seguida por primera vez en su historia entre los mejores. El rival, el Baskonia, será de tronío, pero con la dinámica que llevan los rojinegros y disputándose el partido en el Palacio de los Deportes, soñar con el 'póker' es gratis. Y el Baskonia, de momento, no da el miedo de otrora.