El Covirán busca la gesta que se le niega en el Martín Carpena

Se dan dos circunstancias, la primera, que todos esos enemigos por la permanencia han sumado victorias inesperadas frente a adversarios teóricamente superiores. Así, el colista Leyma Coruña, que ya está a un solo éxito de margen de la tripleta de implicados que le antecede –Hiopos Lleida, Covirán y Bàsquet Coruña–, ganó al poderoso Real Madrid nada más iniciarse el campeonato. Precisamente, el conjunto que preside Marc Gasol sacó adelante complicados partidos como ante el Barça, lo que le sacó del puesto asignado en la primera vuelta como 'farolillo rojo'.

En otros casos sucedió lo mismo. El Río Breogán vive precisamente en la tranquilidad por haberse dado la alegría de batir a varios grandes, lo que le reconforta con dos triunfos de margen, posee ocho en la tabla. De seguir así, posición cómoda que comparte fuera del peligro con Surne Bilbao y Morabanc Andorra, que han reaccionado para salirse de la supuesta quema hacia la Primera FEB, los lucenses reducirían la batalla por la salvación.

Y es que ahora mismo se han quedado cuatro equipos estancados, como el curso anterior. El Leyma Coruña, no tan rezagado como el Zunder Palencia y con un potencial de recursos extras y refuerzos destacado, late, al igual que el Covirán y los catalanes de Lleida y Girona, en lugar de Obradoiro y Breogán.

La segunda premisa es que, en cambio, la formación que comanda desde el banquillo Pablo Pin no ha agregado a su haber, hasta la fecha, ninguna satisfacción a costa de los oponentes más fuertes de la competición. Una lástima, porque rozó las gestas ante Real Madrid y Baskonia, a los que tuvo prácticamente tumbados en el Palacio de los Deportes. Y a ello tampoco contribuye que el irregular equipo vitoriano de Pablo Laso se haya dejado muchos partidos, especialmente en las salidas, ante los rivales directos.

También le pasó esto al Unicaja, que no cumplió y pagó sus despistes con los conjuntos de abajo para perjudicar, de forma indirecta, al Covirán. Los malagueños, por contra, suelen realizar enormes encuentros frente al vecino. Y es el cuadro rojinegro el que paga casi siempre los platos rotos, hasta el punto de que el afamado bloque de americanos de Ibon Navarro se ha ensañado, sin piedad y con marcadores abultados, en las más recientes confrontaciones entre los dos andaluces de la ACB, tras el descenso del Real Betis.

Para colmo de males, el representante de la Costa del Sol afronta la cita de un nuevo derbi andaluz, esta vez en el pabellón Martín Carpena de Málaga, tras su tropiezo en la pista turca del Galatasaray, en la tercera jornada de la fase del 'top 16' de la Champions League, una derrota que escoció bastante, al ser en un choque muy igualado, tratarse de la primera y complicarle el liderato del grupo en pugna con los otomanos y el Lietuvos Rytas. Mal momento para visitarle el Covirán. El Unicaja querrá olvidar rápido el desliz.

Pablo Pin considera que ganar en Málaga, en las circunstancias actuales del equipo granadino, sería algo para registrarlo en los libros de heroica. El entrenador es consciente de que sin Sergi García, baja por el isquiotibial, obligado a forzar a Agustín Ubal como base junto a Rousselle, y con solo nueve hombres disponibles tras las ausencias de Wiley, Clavell y Vicedo, ya no es difícil ganar sino hasta el simple hecho de competir.

El entrenador se refirió a que «prefiero ganar en Coruña que en Málaga, está claro, porque esos duelos valen más y el 'average' puede ser decisivo al final, con él te puedes salvar con once, en vez de doce victorias. Y hacerlo en la última jornada sería fenomenal, un éxito, aunque la gente quiera que sea antes. El equipo dará el máximo, rendirá hacia una oportunidad y si existe aprovecharla. Es un grupo muy profesional, que se entrega siempre, como hicimos ante el Murcia».

Y se centró en la cita de este sábado. «Visitar el Carpena a día de hoy es enfrentarte al mejor equipo de la liga, en especial tras ganar la Copa del Rey, más que al mejor, quizá al que más en forma está. No se me olvida que ir y recibir a este tipo de rivales es para disfrutarlo, porque hemos normalizado jugar contra ellos, Unicaja, Baskonia, Murcia... hay que dar valor a la ACB. Es verdad que no le hemos ganado a ningún grande hasta ahora, pero tampoco se ha comentado que tienen cinco veces más presupuesto que nosotros todos ellos».

Pin insistió en que «vamos a dar nuestro máximo en Málaga, con la mentalidad de vencer y hacer las cosas bien, luego el baloncesto nos pondrá en nuestro sitio, pero esfuerzo, sacrificio y lucha es seguro que pondremos».

En torno al caso de Edgar Vicedo, que sorprendió su marcha porque no es habitual que un lesionado se vaya. Al revés, hasta se le renueva como pasó con Joan Pardina, Pin explicó que «se lesionó de la fascia y siguió jugando con dolor, entrenó desde diciembre condicionado, le costaba, hasta no poder correr, paró dos meses y, cuando se recupera, se vuelve a lesionar encima con rotura. Le estamos muy agradecidos de que aceptara el acuerdo y que dejara la ficha libre a Ndiaye, para no perjudicar así más al club con su baja».