La promoción privada tira del mercado
Continúa siendo necesario ampliar y mejorar el parque de vivienda en alquiler en la provincia
Juan de Dios Molinero
Sábado, 16 de febrero 2019, 02:30
El pasado martes, el Instituto Nacional de Estadística (INE) publicó los datos de compraventa de vivienda en España correspondiente a 2018. A la vista de ... los mismos se podría pensar que el sector ha recuperado la salud, ya que se vendieron 515.000 viviendas a lo largo del año, lo que supone un 10,14% más que en 2017.
Sin embargo, la situación del mercado inmobiliario español es muy heterogénea, existiendo 5 pilares fundamentales con fuerte actividad y bastante distanciadas del resto. En concreto, se trata de las provincias de Madrid, Málaga, Valencia, Alicante y Barcelona; sólo entre estas cinco acumularon durante los últimos doce meses 233.500 viviendas vendidas, que representan el 45% de todas las transacciones registradas en el país.
De la misma manera que en la tendencia general nacional, los datos de Andalucía son también positivos. Se ha vuelto a superar la cifra de 100.000 viviendas trasmitidas (101.330), con un crecimiento del 13% sobre el año anterior, lo que supone el 20 % de la actividad de toda España. Eso sí, Málaga acumula prácticamente un tercio de todas las transacciones andaluzas; en concreto, el 32%. Por lo que a Granada respecta, las ventas han aumentado un 13%, situándose en cifras cercanas a las 10.500 unidades.
Ante estos datos, podemos afirmar que la promoción inmobiliaria evoluciona favorablemente, si bien partía de cifras muy bajas y en la provincia el sector continúa mostrando algunos signos de debilidad. Además, el mercado no ha conseguido dar respuesta a la necesidad de los demandantes de viviendas más jóvenes que acceden por primera vez a un hogar. Por esta razón, continúa siendo imprescindible incrementar el parque de viviendas en alquiler y el alquiler con opción de compra, así como, en términos generales, mejorar la oferta de vivienda nueva en Granada capital.
Por otro lado, es la iniciativa privada, a través de la venta de inmuebles en régimen libre, la que aglutina casi el 90% de transacciones inmobiliarias. Mientras tanto, la vivienda protegida se encuentra en registros del 10% en Andalucía, cuestión que deja en papel mojado los tímidos intentos de la Junta de Andalucía por poner en marcha un plan de vivienda a nivel autonómico.
Donde el panorama ha mejorado de forma importante, eso sí, es en la calidad de la vivienda. Ahora las que se venden nuevas son más eficientes, consumen menos energía, se construyen con mejores materiales y están mejor aisladas. Esta combinación de factores hace de la vivienda un lugar más confortable y permite al propietario capitalizar importantes ahorros, sobre todo en lo que respecta a los costes energéticos. En definitiva, la planta actual de vivienda nueva es más sostenible que la que existía con anterioridad a la llegada de la crisis económica.
Finalmente, las entidades financieras vuelven a apostar por el sector, aunque con unos criterios mucho más exigentes en cuanto a la profesionalidad del promotor, la aportación de fondos propios por parte de este y a la viabilidad económica real del proyecto en cuestión. Las instituciones bancarias filtran las nuevas propuestas inmobiliarias que les van llegando en los últimos años, lo que tiene como objetivo y efecto que la promoción se regule basándose en la demanda real de vivienda nueva ajustada a mercado.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión