Granada recibió en 2018 a más de tres millones de turistas por primera vez

Así, Granada cerró el año pasado con un incremento de 174.279 turistas sobre los registros de 2017, que en términos porcentuales supone una subida del 6,10% interanaual. Se convierte así en la segunda provincia con mayor crecimiento del sector turístico en el contexto de Andalucía. Sólo la superó Almería, que en el mismo lapso de tiempo vivió una subida del 6,35%. Peor suerte corrieron Córdoba, Huelva o Jaén, que perdieron turismo neto según estos datos del INE.

Esta tendencia positiva destaca no sólo en el conjunto de la provincia granadina, sino también atendiendo específicamente a los datos de la capital y la Costa Tropical. Eso sí, mientras la ciudad creció un 4,7% y la Costa en un 4,3%, la provincia registró una tasa de crecimiento un punto y medio mayor, lo que apunta a un proceso de diversificación de la actividad en el mercado turístico en regiones que han hecho una apuesta fuerte por el sector como motor económico. Una situación que los datos al cierre del año afianzan, confirmando la tendencia registrada durante el conjunto del año pasado, y que señalan al turismo como una de las mayores apuestas para el mercado laboral de la provincia.

En cuanto a los destinos, la capital granadina siguió aglutinando a la mayor parte de los visitantes a lo largo de los últimos doce meses. En concreto, prácticamente dos tercios de los tres millones de turistas, el 61,5%, eligió esta ciudad como lugar de alojamiento.

Durante los últimos diez años, el sector turístico en la provincia ha vivido procesos de crecimiento muy importantes hasta colocarse como uno de los aspectos claves del desarrollo económico. De acuerdo con los datos del INE, la llegada de turistas a Granada ha aumentado un 34% en la década previa, pasando de 2,25 millones a los más de tres actuales. Sólo Sevilla supera este nivel de crecimiento en el entorno autonómico, con un 52,6%. En la capital esta cifra es del 26,7%.

La nota menos positiva de los datos del sector turístico al cierre del año la ponen las pernoctaciones y la estancia media, uno de los caballos de batalla de empresarios y administraciones públicas, ya que se considera que aumentar estos índices sería un señal de afianzamiento de un turismo de mayor calidad que ofrece mayores rendimientos económicos a la provincia. En cualquiera de los ámbitos de análisis del INE (provincia, capital o Costa), es posible comprobar que las pernoctaciones crecen a un ritmo menor que la llegada de nuevos visitantes, lo que indica que, aunque vienen más personas, se quedan de media menos tiempo de visita, lo que implica menos gasto. Si el crecimiento fue del 6,1% en el número de turistas, las pernoctaciones subieron un 5,8% en el conjunto de la provincia. En la capital la brecha es un poco mayor, de casi dos puntos, con un crecimiento de las pernoctaciones del 3% frente al 4,7% del número de acogidos.

Al cierre del año, la estancia media se mantenía prácticamente en el mismo nivel que en el mismo momento del año anterior, con una diferencia de una décima entre los dos últimos meses de diciembre.