Freno al crecimiento del empleo: 2018 fue el peor en cinco años en Granada
La población ocupada en la provincia aumentó un 0,4% el año pasado, uno de los datos más bajos de Andalucía
La creación de empleo comenzó a frenarse el año pasado, que resultó ser el más bajo del último lustro en lo que se refiere ... a la incorporación de granadinos al mercado laboral. Durante los últimos cuatro, los incrementos interanuales en el número de personas ocupadas en la provincia habían rozado o superado los dos puntos porcentuales, coincidiendo con los anuncios de recuperación que el anterior Ejecutivo, encabezado por Mariano Rajoy, comenzó a lanzar en el año 2014. Sin embargo, la tendencia pareció comenzar a detenerse en 2018, en el que el aumento en la población empleada fue de sólo el 0,4% con respecto a los doce meses anteriores. Una señal de aviso para el mercado laboral de Granada, que podría ser sólo un bache o señalar a una situación de agotamiento del empleo en la provincia.
De acuerdo con los datos que ofrece la Encuesta de Población Activa (EPA), que publica con periodicidad trimestral el Instituto Nacional de Estadística (INE), el promedio del número de personas que tenían trabajo (población ocupada, en su denominación estadística) fue de 328.200 en 2018. La misma media, en los doce meses previos, fue de 326.900. Estos datos quieren decir que, a lo largo de todo 2018 sólo se incorporaron al mercado laboral de Granada 1.375 personas, o unas 115 cada mes. Una cifra más bien escasa para una provincia que, según los propios datos de la EPA, cerró el año con una tasa de paro superior al 22%.
Este nivel de crecimiento es el más bajo registrado en el último lustro en Granada. Según el INE, desde 2014, cuando el empleo comenzó de nuevo a crecer tras otros cinco años de caída que habían comenzado con el inicio de la crisis económica tras el estallido de la burbuja de las hipotecas 'subprime' y sus reverberaciones en España en 2008, no se registraba una tasa de incremento tan baja de la población ocupada. Entre 2016 y 2017, el número de personas que se habían incorporado al mercado laboral provincial había aumentado un 5,3%, o en 16.325 individuos en términos absolutos, pasando de 310.500 ocupados a casi 327.000. Un año después, el diferencial fue de sólo 1.375 personas, casi cero en términos interanuales, siempre según los datos de la EPA.
En el contexto andaluz
La situación deja a Granada en el grupo de las provincias andaluzas que muestran mayor debilidad en lo que se refiere a su mercado de trabajo. Lo que dicen los datos del Instituto Nacional de Estadística es que Granada es la tercera región de la comunidad en la que menos aumentaron los niveles de población empleada en 2018 sobre el promedio de los doce meses anteriores.
En concreto, el crecimiento 0,4% registrado en la provincia granadina sólo se ve superado, en términos negativos, por Jaén, donde fue de apenas el 0,1%, y Almería; allí ni siquiera hubo crecimiento neto del número de ocupados, que bajaron un 0,6% respecto al año previo. El dato granadino está, pues, muy lejos de acercarse siquiera a los de Málaga, Sevilla y Córdoba, las tres que lideraron en 2018 el escalafón de este indicador estadístico.
En la provincia malagueña, la que más creció, la subida del número de ocupados en 12 meses alcanzó el 6,8%; en términos absolutos, allí más de 40.000 personas pasaron a estar ocupadas de media en un año, en comparación con las 1.375 de Granada. En Sevilla, mientras tanto, la variación interanual fue del 3,6% sobre los doce meses anteriores, o de más de 25.000 personas en términos absolutos, lo que le permite ser la segunda provincia con mayor aumento de la población ocupada, siempre según los datos del INE.
Una circunstancia derivada de esta situación es que al cierre del cuarto trimestre de 2018 Granada fue la tercera provincia de Andalucía con mayor tasa de paro, con el 22,44%. Sólo la superaron Cádiz, capital europea del paro, con un 27,3% de tasa de desempleo, y Córdoba, que apenas presentó tres centésimas más que Granada en este índice.
Menos población activa
Otra de las tendencias que señalan los datos de la Encuesta de Población Activa, y que es positivo sólo a medias, es un descenso importante del número de parados en términos porcentuales en la provincia granadina en 2018 sobre el año previo. En concreto, desde 2017 la caída interanual es del 8,6%, o de 1.010 personas en términos absolutos, hasta alcanzar el número de personas desempleados más bajo registrado desde 2008. También es menor que la que el mercado laboral granadino vivió en 2017, del 14,5% sobre el año previo.
Aquel año la cifra de parados fue de 84.700, lo que significa que todavía existe un diferencial de más de 19.000 granadinos que antes de la crisis tenían trabajo y ahora no. En esa última década la población de la provincia ha aumentado en 16.521 personas, lo que indica también que existen aún importantes barreras de entrada al mercado laboral.
En este descenso del número de parados influye también la caída de la población activa, es decir, aquella que o trabaja o está en edad de trabajar y quiere hacerlo. En 2018 cayó en la provincia granadina un 1,9% sobre el dato de los doce meses previos, siempre según los datos de la EPA que publica el INE cada trimestre. Se trata del mayor descenso registrado en los últimos diez años, más del doble del que se produjo en 2017, cuando la caída de la población activa fue del 0,7%.
Señales de aviso para mirar con atención la evolución del mercado laboral de la provincia durante este año.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión