La trágica noche de aquel 18 de agosto
Memoria democrática ·
Alfacar recuerda el asesinato de Lorca con la esperanza de que, poco a poco, se sigan identificando a las cientos de víctimas que yacen entre el municipio y Víznar
Todos los años, mediado agosto, Alfacar y el mundo entero conmemoran el vil asesinato del poeta Federico García Lorca y, por extensión, de las decenas ... de miles de personas que fueron fusiladas y que están enterradas de forma anónima en fosas y cunetas por toda España. Hace 88 veranos de aquello –Lorca fue fusilado el 18 de agosto de 1936–. Pero este 88 aniversario, desarrollado ayer por la noche en el Parque García Lorca, fue distinto. Y lo fue porque, como subrayó la propia alcaldesa de Alfacar, Fátima Gómez, por fin se están identificando los cuerpos de los cientos de personas que yacen entre Alfacar y Víznar. En este caso, Juan de Dios Adarve y Antonio Rosales, cuyos restos fueron entregados a sus allegados el pasado 22 de junio gracias a la impecable labor de exhumación que está llevando a cabo la Universidad de Granada en el Barranco de Viznar. Los familiares de uno de ellos, Antonio Rosales, viven precisamente en Alfacar.
La ceremonia institucional, conducida por la colaboradora de IDEAL Encarna Ximénez, que comenzó justo cuando el sol ya se apagaba Alfacar –maravilloso atardecer–, consistió básicamente en la ofrenda floral en el monolito 'in memoriam' del autor de 'La casa de Bernarda Alba', 'Romancero gitano' y 'Bodas de sangre'. Un homenaje en el que participaron, entre otros, el subdelegado José Antonio Montilla, el delegado de Cultura Fernando Egea, regidores de los municipios lorquianos, particulares y responsables de la Diputación de Granada, la institución responsable de la organización de esta cita anual.
El presidente del ente provincial, Francis Rodríguez, recordó que los que acabaron con Lorca hace 88 años «no han podido silenciar la fuerza de su voz y de su obra». «Un Federico –dijo– que nos engrandece y del que sentimos un profundo orgullo». «Aquella lejana noche del 17 de agosto, en medio de la profunda oscuridad, por estos mismos parajes agrestes de sierra de jaras y tomillos, la crueldad se personificó en unos hechos que jamás debieron de haberse producido», comento Ródríguez, quien agregó que este sábado, en el nombre y la memoria de Lorca, «también reconocemos a todos los que en aquel tiempo murieron asesinados».
La noche finalizó con dos representaciones en el Parque García Lorca y en el Baranco de Víznar
Rodríguez recalcó que Lorca sigue siendo una fuente de inspiración. «Dejó un gran legado que tenemos el honor y el deber de proteger», afirmó. Y expresó el deseo de la Diputación de seguir trabajando en ello «sin borrar un ápice de lo que aquí ocurrió». «Vamos a seguir defendiendo la libertad –prosiguió– y debemos hacerlo juntos, sin enfrentamientos ni polémicas estériles». «Hoy es un día para sellar nuevos espacios de concordia y de diálogo que nos permitan avanzar en esta dirección», agregó.
Fátima Gómez manifestó que el acto de anoche recordó a Lorca y a todas las víctimas «que no sabemos donde están tanto en Alfacar y Víznar como en toda España». Respecto al evento en sí, Gómez destacó que se siga vinculando a manifestaciones culturales, aunque dejó entrever su malestar por haber tenido conocimiento del programa a través de la invitación –en este punto conviene recordar que ella misma fue diputada de Cultura durante ocho años–.
José Antonio Montilla resaltó la aprobación de la Ley de Memoria Democrática y el desarrollo de políticas de reparación en los próximos años, mientras que Fernando Egea, en representación de la Junta, habló de Lorca en clave de pasado, presente y futuro.
El teatro fue protagonista de la velada por partida doble. En el propio Parque Federico García Lorca la compañía Karma puso en escena 'Federico en carne viva', de José Moreno. Mientras que en el Barranco de Víznar se representó 'Federico, no hay olvido, ni sueño: carne viva', escrita y dirigida por María San Miguel.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
