El cantante Aaron Carter muere a los 34 años tras varias adicciones
Era hermano de Nick Carter, componente de Backstreet Boys, y con su primer álbum llego a vender más de un millón de copias
r. c.
Domingo, 6 de noviembre 2022, 01:12
El cantante y actor estadounidense Aaron Carter, de 34 años, fue hallado muerto este sábado en su vivienda en Lancaster, en el estado de California ( ... Estados Unidos). Así lo informó el portal de noticias del espectáculo TMZ citando fuentes policiales. Él mismo había reconocido tiempo atrás que tenía problemas de adicción al alcohol y los medicamentos. También le diagnosticaron esquizofrenia, trastorno bipolar, depresión maníaca y ansiedad.
Las autoridades acudieron al domicilio de Carter a las 11.00 horas (hora local) tras una llamada al 911 que alertaba de que un hombre se había ahogado en el lugar. informa Europa Press. Una vez dentro descubrieron el cuerpo del cantante. Su hermana Leslie falleció en 2012 de una sobredosis de medicamentos que estaba tomando para tratar la depresión y su madre admitió en su día que había tenido un largo historial de problemas mentales.
Aaron Carter saltó a la fama en los años 90 apenas siendo un niño y fue impulsado por la fuerza mediática de su hermano, Nick Carter, uno de los cantantes de Backstreet Boys. Sin embargo, sufría problemas de salud mental como esquizofrenia, trastorno bipolar, depresión maníaca y ansiedad, además de problemas de adicciones.
El artista fallecido lanzó cuatro álbumes de estudio, el primero de ellos (Aaron Carter') se publicó en 1997 -cuando solo tenía nueve años- y alcanzó la condición de disco de oro vendiendo más de un millón de copias en distintos países. Durante su infancia también solía hacer giras con la banda de su hermano. En 2000 sacó otro exitoso álbum ('Aaron's party') que llegó a ser triple platino para después completar su transición como artista desde el pop hasta el rap y otras especialidades.
Rehabilitación «voluntaria»
En septiembre pasado, el cantante reveló que se había registrado «voluntariamente» en un programa de un centro de rehabilitación para tratar de recuperar la custodia de su hijo, Prince, que ahora tiene solo once meses.
Carter había dicho anteriormente que estaba buscando ayuda para controlar los «desencadenantes» que le hacían querer fumar marihuana. También admitió que tomaba Xanax como parte de un plan de «medicación reglamentada» para mantenerlo «limpio de inhalar polvo».
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